Noche histórica para el béisbol. Tercer partido de las Series Mundiales, lo que sería conocido como play-off final en otros deportes, entre Los Angeles Dodgers y los Boston Red Sox. El partido ha empezado a las dos de la madrugada (hora catalana) y ha acabado pasadas las nueve de la mañana. 7 horas y 20 minutos que suponen un nuevo récord para un partido de las Series Mundiales (el anterior hito no llegaba a las 6 horas de juego).

Evidentemente, también se ha batido el récord de entradas. El récord previo estaba en 15 y no ha sido hasta la 18ª que los Dodgers han podido cerrar el partido. Para ponerlo en contexto, en un partido normal hay 9 entradas. Como en la novena iban empatados, se ha jugado una prórroga que se ha alargado a 9 entradas más, es decir, es como si la prórroga fuera otro partido entero.

Al final, después de más de 7 horas y 18 entradas, los Dodgers se han impuesto por 3-2 con un "walk-off" de Max Muncy. Los Red Sox, sin embargo, todavía dominan la serie por 2-1. El cuarto partido se jugará la madrugada del sábado al domingo.