La ofensiva del PSG por Gavi vuelve a sacudir al FC Barcelona en un momento delicado para el club azulgrana. Desde París, Nasser Al-Khelaïfi ha dado luz verde a un movimiento que llevaba meses madurándose en silencio y que ahora ha estallado con fuerza: Luis Enrique quiere al centrocampista andaluz como refuerzo prioritario para su proyecto, convencido de que su energía, personalidad y ambición encajan a la perfección en el vestuario parisino. El entrenador asturiano siempre ha tenido una debilidad especial por Gavi y considera que su llegada sería determinante para elevar el nivel competitivo del equipo. Por eso, el PSG ya ha puesto sobre la mesa una primera oferta formal para tratar de seducir al Barça.
La propuesta, según fuentes internas, es muy clara: 40 millones fijos más 20 en variables. Pero esas variables no son precisamente fáciles de alcanzar y, en la práctica, el club azulgrana entiende que la oferta real es de apenas 40 millones. Una cifra que en el Camp Nou consideran totalmente insuficiente, especialmente tratándose de un jugador que ha sido declarado intransferible en numerosas ocasiones por su peso en el presente y futuro del equipo.
Laporta fija el precio mínimo: 70 millones
En este contexto, Joan Laporta tiene una postura firme e inamovible: Gavi no sale del FC Barcelona por menos de 70 millones. El presidente azulgrana entiende que no solo se trata de un activo deportivo de primer nivel, sino de un símbolo del proyecto y de la Masia. Además, Laporta ve en él un capitán de futuro, un futbolista que representa la esencia competitiva del Barça y cuya marcha sería un golpe moral difícil de asumir para la afición. Por eso, aunque las relaciones con el PSG han sido tensas en el pasado, esta vez el mensaje del club catalán es directo y sin matices: quien quiera a Gavi, tendrá que pagar lo que vale.
Luis Enrique aprieta y el PSG no se rinde
Aun así, en París no tiran la toalla. Luis Enrique insiste internamente en que Gavi sería un fichaje clave y ya ha pedido al club que estudie aumentar la oferta para acercarse a los 70 millones que exige Laporta. En el PSG creen que el jugador podría formar una sociedad espectacular con los líderes del equipo y convertirse en uno de los motores del nuevo proyecto.
Así pues, el pulso está servido: el PSG quiere acelerar, Laporta no piensa ceder y el futuro de Gavi se convierte, otra vez, en uno de los grandes culebrones del mercado.