La dirección del Museu Nacional d'Art de Catalunya (MNAC) ha aceptado que se cree una comisión de peritos para velar por la ejecución de la controvertida sentencia que obliga al traslado de las pinturas románicas de Sijena del museo catalán al monasterio aragonés. Pero lo ha condicionado a la presencia de expertos internacionales entre los miembros de la comisión. Así, y según el escrito de alegaciones del MNAC a la jueza, el museo indica que la comisión debe estar formada por el mismo número de peritos propuestos, por un lado, por el Ayuntamiento de Vilanova de Sijena y el gobierno de Aragón y, por otro, por el MNAC, según ha avanzado ACN.

El museo renuncia a formar parte de la comisión de peritos y ha propuesto que estén presentes en ella instituciones técnicas en conservación y restauración de la Generalitat, el Ministerio de Cultura y el Ayuntamiento de Barcelona, así como expertos internacionales. Estos deberían proceder de entidades como la UNESCO, el Centro Internacional de Estudios para la Conservación y la Restauración de los Bienes Culturales (ICCROM), o el Consejo Internacional de los Monumentos y Sitios Históricos (ICOMOS), entre otros.

El MNAC entiende que la jueza no pide al museo catalán que designe a las personas concretas que deberían integrarse en la comisión de peritos, sino tan solo a instituciones estatales e internacionales que, si se acepta su participación, "deberán nombrar a las personas que consideren más expertas para emitir su opinión sobre el aspecto o aspectos de la ejecución de la sentencia condenatoria que sean solicitados en cada caso por el Juzgado". El MNAC ha defendido que, ya que se está hablando "de las mejores pinturas murales del arte hispánico, y una de las más excelentes en el ámbito mundial, no se entendería una comisión de peritos que no estuviera formada, en gran medida, por peritos mundiales". La propuesta tiene el acuerdo del Patronato del MNAC por unanimidad.

Complejidad del traslado de las pinturas murales

En el texto de las alegaciones, el museo dirigido por Pepe Serra comunica que no se opone a la creación de la comisión de peritos sugerida por el juzgado de Huesca siempre que "tanto la creación como el funcionamiento de esta comisión se produzcan con pleno respeto a las previsiones legales y con sujeción al principio de legalidad procesal sancionador en el artículo 1 LEC". El MNAC argumenta que la intervención de los peritos está plenamente justificada en este caso debido a la complejidad que comporta la ejecución de la sentencia, es decir, el traslado de las pinturas murales del siglo XII.

Por ello, el MNAC señala que solo personas con "los necesarios conocimientos científicos, artísticos, técnicos o prácticos para valorar hechos o circunstancias relevantes en el asunto o adquirir certeza sobre ellos", como señala uno de los artículos de la LEC, "tienen suficiente competencia para prestar a la jueza el auxilio técnico necesario en su toma de decisiones". El museo añade que los profesionales de la comisión deberán acreditar "una experiencia relevante en materia de pintura mural".

El MNAC ha explicado que no realizará un nombramiento o designación de peritos, sino "una mera propuesta de nombramiento o designación que, si procede, deberá ser designado por la jueza". A su juicio, el objeto de la comisión de peritos debe ser la prestación de asesoramiento y apoyo al juzgado para ejecutar la sentencia de la mejor manera posible. Es decir, el desmontaje de las pinturas murales del monasterio de Sijena de las salas 16 y 17 del MNAC y su embalaje y posterior traslado. "Todo ello, mediante la oportuna evaluación de los riesgos inherentes a las diversas formas posibles de cumplimiento de la sentencia y la posterior preparación del proyecto técnico de cumplimiento de la sentencia".

Diversos expertos han alertado en reiteradas ocasiones del peligro de transportar las obras de Sijena a su emplazamiento original en Aragón. De hecho, el mismo director del MNAC, Pepe Serra, señalaba hace unos días que hasta hoy, nadie ha dejado escrito en un papel que sabe cómo trasladar las obras, como sentenció el Tribunal Supremo, sin que se desmorone o se dañe ninguna de las pinturas murales. "Necesitamos que aparezca alguien que se haga responsable porque ahora hay evidencias científicas y no opiniones", advirtió Serra, admitiendo que es una situación muy difícil mientras desde Aragón se presiona para que se realice el retorno.