El agua es una sustancia esencial para la vida, de hecho, nuestro cuerpo está formado en su gran mayoría por agua, ya que es ésta la que permite un entorno interior y exterior para las células donde todas las reacciones químicas que necesitamos pueden ser llevadas a cabo. Al practicar deporte el organismo elimina agua a través de la transpiración y si no reponemos adecuadamente el líquido perdido así como los electrolitos, podemos entrar en un estado de deshidratación y esto disminuye la calidad de tus entrenamientos. En este artículo te mostramos cómo la deshidratación puede afectarte y te ofrecemos unos útiles consejos para mantenerte hidratado en todo momento.
La importancia del agua en nuestro organismo
El agua además de facilitar numerosos procesos que permiten la vida es la encargada de regular la temperatura corporal y contribuye directamente en el aporte de oxígeno y nutrientes a los tejidos. Además, es el medio donde encontramos los electrolitos, sales minerales que resultan imprescindibles para nuestra salud cuya deficiencia puede ocasionar graves problemas en la fisiología del músculo.

La hidratación debe darse antes, durante, y después del ejercicio
Es normal que se produzca una pérdida de líquidos durante el ejercicio intenso o en ambientes cálidos ya que la transpiración es un proceso que permite controlar la temperatura interna de nuestro organismo, pero si no corregimos esta situación puede producirse deshidratación, lo que tiene consecuencias negativas para el atleta y para el entrenamiento:
- La deshidratación impide alcanzar un rendimiento máximo
- Disminuye el flujo sanguíneo a los tejidos y por tanto también el aporte de nutrientes y oxígeno
- Altera la frecuencia cardíaca
- Aumenta la temperatura corporal
- Acelera la aparición de la fatiga y el cansancio
- Aumenta el riesgo de sufrir lesiones y calambres
Para prevenir eficazmente la deshidratación es necesario tomar líquidos antes, durante y después de la práctica de ejercicio.
¿Cómo hidratarse adecuadamente?
Cualquier persona, aunque no realice ejercicio físico necesita beber diariamente 2 litros de agua de manera aproximada, pero si hablamos de un deportista, es obvio que estos requerimientos se van a ver aumentados.
Al margen de la importancia de ingerir la suficiente agua también es imprescindible que el deportista ingiera diariamente una cantidad adecuada de hidratos de carbono, ya que este nutriente es la principal fuente de energía del organismo y ayuda a soportar mejor el desgaste físico que se sufre durante el ejercicio.
La hidratación debe darse antes, durante, y después del ejercicio y por este motivo si bien el líquido no puede faltar debe ser una ingesta continua pero moderada, a fin de evitar cualquier síntoma digestivo desagradable.