Digestión pesada, y malestar, después de una comida demasiado copiosa. ¿Te suena? Es un problema que ocurre con frecuencia. Te ayudamos a evitarlo.

Si bien no es algo con lo que, afortunadamente, tengamos que convivir a menudo, de forma ocasional padecemos diversas afecciones relacionadas con el estómago. Reflujo gástrico, indigestión, inflamación, estreñimiento o incluso diverticulosis… Por eso, y para evitar que una digestión pesada te estropee las reuniones familiares, algunos expertos nos proponen diez formas de prevenirla.

Algunas enfermedades afectan el tracto gastrointestinal

Para empezar, es importante recordar que no hay datos que nos permitan asociar los problemas gastrointestinales con el proceso normal de envejecimiento. A esto, debemos añadir que muchas enfermedades, como pueden ser la diabetes, la artritis o la hipertensión sí afectan el tracto gastrointestinal.

Digestión pesada: los cinco desencadenantes

  1. Refrescos y bebidas azucaradas. El ácido fosfórico y el azúcar contribuyen a un pH ácido en tu organismo, uno de los factores desencadenantes de afecciones gastrointestinales.
  2. Carne roja. Si bien es cierto que el consumo de carne roja moderado no está asociado a ninguna patología en concreto, ésta también puede contribuir a la formación de pH ácido en el organismo.
  3. Alimentos procesados. Vigila tu consumo de comida altamente procesada. Una vez más, son alimentos generadores de ácido y que también alimentan a la población de bacterias insalubres y, al ser altamente apetecibles, es fácil consumirlas en exceso.
  4. Café y Té Negro. Aunque ya esto dependería de casos particulares, el uso de los mismos contribuyen a crear ese ambiente ácido. Por eso, también son posibles desencadenates de alguna molestia estomacal leve. Elige té rojo o rooibos en su lugar, ya que producen una baja formación de ácido, no contienen cafeína y son ricos en antioxidantes.
  5. El alcohol. Incluyendo la cerveza y el vino. El alcohol contribuye a la formación de ácido. Evítalos o modera su consumo de forma ocasional.
Digestión Pesada
Digestión Pesada

Digestión pesada: lo que deberías hacer

  1. Añade frutas y verduras. Contribuyen a reducir los efectos de alimentos que generan ácido en nuestra dieta. Y no olvides su importante aporte de fibra que ayudará en tus digestiones y mejorarán la salud de tu flora intestinal.
  2. Consumir yogur y fermentados. Siempre en versión natural no azucarada. Estos contienen bacterias beneficiosas que ayudan a la regulación de los problemas gastrointestinales.
  3. Incluye probióticos. Ya sea mediante alimentos, como el yogur, o de forma aislada en tu alimentación. Existen estudios sobre dos de sus variantes, lactobacilos y bifidobacterias, que muestran que éstas pueden aliviar los dolores gastrointestinales.
  4. Añade ejercicio físico a tu rutina diaria. El estrés también está asociado con los trastornos gastrointestinales. Una buena dosis de ejercicio al día te ayudará a liberarlo y permanecer más relajado a lo largo del día.
  5. Come ‘comida real’. En muchos casos éste tipo de afecciones se manifiestan por el continuo consumo de alimentos procesados. La base de tu alimentación deben ser proteínas de calidad, grasas saludables, verduras, hortalizas y frutas.

Aún así, ante cualquier síntoma de afección gastrointestinal es mejor acudir a un profesional para que valore personalmente el caso. No hay que auto-medicarse de forma aleatoria.