El Zoo de Barcelona refuerza el confort y la hidratación de los animales por|para el "repunte del calor" después de un final de julio atípico con lluvias y temperaturas más suaves. A causa del episodio de calor previsto para esta semana, el Zoo pone en marcha un protocolo especial para aligerar los efectos que las altas temperaturas provocan en los animales. Estas medidas extraordinarias son totalmente complementarias a la atención diaria que reciben todas las especies por parte de los cuidadores y las cuidadoras y se alinean con el objetivo del Zoo de velar por el bienestar y la salud animal. Antoni Alarcón, que es el director del zoológico, ha explicado que activan el protocolo contra el calor "siempre que la temperatura pasa de los 30 grados", pero que, en los últimos años, la aplicación de estas medidas se ha ido adelantando, en declaraciones en la ACN. Entre las medidas: más duchas y ventilación, renovación más frecuente del agua y comida especial, como fruta congelada, helados de caldo y granizados de gusanos.

Aunque, por su posición en la trama de la ciudad y gracias a la sombra que dan los árboles, dentro del Zoo de Barcelona siempre hay dos o tres grados de temperatura menos que en el resto de la ciudad, cuando se superan los 30 grados los cuidadores ponen en marcha un protocolo especial por "aligerar los efectos que las altas temperaturas provocan en los animales". El Zoo de Barcelona también quiere mejorar el confort de los usuarios en verano y están "estudiando" como dar el paseo "más agradable" a los visitantes. "Tenemos unos pulverizadores de agua para hacer más fresca a la visita y eso es una de las cosas que muy seguro iremos incrementando", ha avanzado Alarcón. Ahora ya hay algunos instalados, principalmente en las zonas de juego para los niños. Las medidas que se adoptan para mejorar el bienestar de los animales se encaminan en diferentes bandas, tanto con respecto a la alimentación como la hidratación y la ventilación de los espacios.

 

Una de las prioridades es garantizar la buena hidratación de los animales. Para hacerlo, el Zoo de Barcelona pone más abrevaderos en las instalaciones donde se encuentran los animales y renueva con más frecuencia el agua para que esté fresca. También se intensifica la limpieza y renovación del agua de las zonas de baño y los lodazales que tienen algunas especies, unos espacios que tienen un papel importante en la regulación térmica de animales como los facóqueros orientales y las elefantas. Precisamente, a las elefantas, pero también en otras especies como el bisonte y el búfalo, se las remoja haciendo uso de mangueras o aspersores y en otros se les aplican diferentes mecanismos a los dormitorios para facilitar la renovación del aire y controlar así la climatización de estas instalaciones. La alimentación es otro elemento clave que se tiene que adaptar durante los periodos de calor. Algunos ejemplos son la fruta congelada y los helados de caldo o de zumo de fruta que se ofrecen a los primates; los bloques de hielo con fruta para las jirafas; o los granizados de gusanos para las mangostas y las suricatas.