La inteligencia artificial (IA) generativa traspasa las fronteras de las aplicaciones especializadas y desembarca directamente en WhatsApp. Millones de usuarios de la plataforma de mensajería instantánea pueden ahora acceder a asistentes como Microsoft Copilot y ChatGPT interactuando con ellos como si fueran contactos convencionales, sin necesidad de recurrir a sitios web externos o descargas complementarias. Esta integración, distribuida de forma viral a través de guías digitales y comunidades tecnológicas, representa un salto significativo en la accesibilidad de la IA, ubicando capacidades avanzadas de generación de texto e imágenes en el entorno de comunicación más cotidiano.

La activación de estos asistentes se realiza mediante un procedimiento sencillo y estandarizado:

  • Abrir la aplicación WhatsApp.
  • Seleccionar la opción para "Nuevo chat".
  • Ingresar en la barra de búsqueda el número correspondiente al asistente deseado.
  • Iniciar la conversación de manera inmediata.

Los usuarios tienen la opción de guardar estos números en su agenda y personalizar el nombre del contacto para un acceso más rápido y reconocible. Una vez establecido el contacto, las capacidades disponibles son extensas. Microsoft Copilot, basado en los modelos más recientes de la compañía, permite a los usuarios:

  • Redactar y editar textos de cualquier índole (mensajes, correos, contenidos).
  • Generar imágenes a partir de descripciones textuales detalladas.
  • Resumir documentos o hilos de conversación extensos.
  • Funcionar como un motor de búsqueda de alta precisión para resolver consultas.

Por su parte, ChatGPT ofrece su característico modelo conversacional para tareas como:

  • Brainstorming o lluvia de ideas creativas.
  • Asistencia para el aprendizaje y explicación de conceptos.
  • Traducción de idiomas en tiempo real.
  • Resolución de problemas lógicos y de programación.

Esta integración consolida a WhatsApp no solo como una plataforma de comunicación, sino como un centro de productividad y utilidad informativa. Pese a la funcionalidad, es crucial destacar que este acceso no constituye un servicio oficial lanzado por Meta, Microsoft o OpenAI. Se trata de una implementación realizada a través de servicios de terceros que utilizan las API públicas de estas compañías. En consecuencia, especialistas en ciberseguridad han emitido alertas sobre las precauciones indispensables:

  • Abstenerse de compartir información personal sensible como contraseñas, datos financieros, números de identificación o historiales médicos.
  • Verificar la autenticidad del número de contacto para evitar posibles intentos de phishing mediante números suplantados.
  • Comprender que la estabilidad y calidad del servicio pueden variar, al no contar con el soporte directo de las empresas matrices.
  • Mantener una actitud crítica frente a las respuestas, dada la posibilidad de que los modelos de IA generen alucinaciones o información errónea.

La incorporación de asistentes de IA en aplicaciones de uso masivo como WhatsApp marca un punto de inflexión en la adopción popular de esta tecnología. Este movimiento acerca el poder de la IA generativa a un público que de otra manera podría no haber explorado estas herramientas, integrando sus capacidades en el flujo natural de la comunicación digital y redefiniendo el paradigma de la interacción entre el usuario y la máquina.