La empresa Prefabricats Pujol ha cerrado un acuerdo con el grupo Joan Martorell para la compra de Prefabricats de la Selva de Santa Coloma de Farners. La factoría de hormigón se incluirá en uno de los grupos líderes del sector y se garantiza la continuidad de toda la plantilla de trabajadores. Además, con este centro, Pujol abrirá la producción en la demarcación de Girona, la única donde aún no tenía presencia. Por su parte, el grupo Joan Martorell aprovecha la desinversión para convertirse en un referente de la economía circular y la sostenibilidad forestal. Ahora, el principal reto del grupo es la nueva planta de tacos y palets hechos íntegramente de madera reciclada.

Prefabricats Pujol, con sede en Mollerussa, pasará a gestionar la fábrica de Prefabricados la Selva. Se trata de una factoría que tiene más de 85 años de trayectoria ubicada en Santa Coloma de Farners y está especializada en la extracción de áridos y la producción de vigas y material de hormigón. Ahora, pasará a formar parte del grupo Pujol y permitirá que esta marca del Pla d'Urgell desembarque en la demarcación de Girona, el único territorio catalán donde aún no tenía presencia.

Prefabricats Pujol cuenta con 23 centros productivos, almacenes y oficinas repartidas entre el Estado y el Reino Unido. En 2024 la marca alcanzó una facturación agregada de 210 millones de euros, lo que supone un 3,71% más que el año anterior. Actualmente la plantilla tiene 827 trabajadores.

Por otro lado, el acuerdo permite que el grupo Joan Martorell se convierta en un referente en economía circular y gestión forestal. En 1966 comenzó su trayectoria en el sector de la madera y actualmente mantiene su apuesta por un modelo industrial comprometido con la innovación y la sostenibilidad.

De hecho, hace poco se ha estrenado una planta de biomasa para tratar la madera que no es apta para el aserradero y, de este modo, se aprovecha toda la materia forestal que hasta ahora no se utilizaba. Esto contribuye a una gestión sostenible de los bosques, porque reduce la masa que puede convertirse en combustible en casos de incendio forestal. En este sentido, el grupo quiere participar de forma activa en la prevención de incendios obteniendo un beneficio económico de la limpieza de bosques.

El proyecto más ambicioso de Joan Martorell, sin embargo, pasa por la nueva planta de tacos y palets aglomerados que se harán íntegramente con madera reciclada. Implica una inversión de 30 millones de euros y ha obtenido la primera plaza en las ayudas de impulso de la economía circular del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia de los fondos Next Generation.

En paralelo, el grupo ha impulsado la restauración de una finca afectada por la sequía donde se han plantado más de 10.000 árboles para identificar las especies más resilientes al cambio climático. El grupo empresarial se encarga de gestionar forestalmente fincas propias y de terceros de donde obtiene la madera para los diferentes proyectos empresariales que gestiona.