La energética de José Elías, Audax, quiere corregir las caídas en bolsa y de beneficios con una estrategia de integración de negocios en los mercados donde ya opera e inversiones de entre 150 y 200 millones. De entrada, dio buen resultado en bolsa, con una subida de casi el 9% en la jornada que corrigió la caída posterior a los resultados de septiembre, pero todavía con un negativo del 16% en el último año.

La cotizada explicó este jueves unos planes basados en una buena remuneración a los accionistas a partir de una recompra de acciones y en cubrir la generación en los mercados donde ya tiene comercialización.

La apuesta es la fotovoltaica y el impulso de demanda que generarán los nuevos centros de datos en los mercados donde está presente. Aunque no hay compromiso inversor ni de integrar todos los negocios, el objetivo es hacerlo con una inversión de entre 150 y 200 millones, según anunció este jueves. . 

El apagón afectó los resultados de los primeros nueve meses del año a la compañía, que presentó unos beneficios un 52% inferiores a los de septiembre del año anterior, con 22,9 millones en los primeros nueve meses, por este motivo. Para corregir la bajada inversora, una recompra de acciones que sumará 20 millones en dividendos a los esperados de 15 millones hasta el próximo año, y que irán creciendo paralelamente a la actividad de la compañía. Y para protegerse de posibles daños de un apagón, anunció que traspasarán el coste posterior a los clientes, 

En el horizonte, un ebitda que ha de ser de 180 millones el año 2030, un 80% más que los 100 actuales y un beneficio neto que se debe disparar más del 100% de los 35 a los 85.

La mayor parte del crecimiento se tiene que dar, explicó el jefe de estrategia Pablo Fernández durante un encuentro con los inversores, con la actividad actual, ya que la demanda eléctrica tiene que crecer un 30% hasta 2030 por los centros de datos vinculados a la Inteligencia Artificial. 

El resto, gracias a una estrategia prudente y sin aventuras, centrada en "mercados seguros" y en contratos de PPA que garantizan precios a largo plazo y, de hecho, países ya conocidos. Con una inversión de entre 150 y 200 millones en parques eólicos y fotovoltaicos, la idea es integrar los negocios allí donde la empresa ya está presente. Si hay alguna oportunidad en un mercado nuevo, la aprovecharán, pero no hay ningún compromiso ni necesidad de hacerlo. Al negocio de las baterías también han entrado, hibridando los parques fotovoltaicos ya existentes como están haciendo en Toledo. 

Así, por ejemplo, Alemania, Países Bajos o Hungría, donde solo hay comercialización, serían destinos idóneos para instalar nuevos parques. Ya lo están haciendo con dos fotovoltaicos en Italia, un país con potencial de crecimiento en renovables. Todo esto sin contar con la empresa telefónica que abrirá el año que viene con la que aspira a tener 30.000 clientes de móvil y 20.000 de fibra entre España e Italia, primeros mercados donde operará. 

Con 2.000 millones en ingresos que no son buena guía por la variación de los precios de la electricidad, pero sí que muestran la magnitud de la empresa, Audax presumió de trayectoria después de haber pasado de 10,5 TWh de capacidad en el año 2020 a 15,8 en 2025. La entrada en Alemania e Italia (con la compra de Compagnia energetica italiana) en 2015, en Holanda vía Main Energie en 2017 y en Hungría con E-on en 2020 ha permitido a la empresa diversificar su negocio. 

Actualmente, tiene una cartera de 325 MW operativos y 712 en desarrollo, con un negocio repartido en un 37% en España e Italia, un 29% en Holanda (donde tiene un buen mercado de gas), un 22% en Hungría y un 12% en el resto de países mencionados sumando Francia y Panamá, donde tiene generación. 

Con una deuda de 222,4 millones, Audax busca un refinanciamiento para el cual ha contratado a Alantra, explicó Cinco Días, con el fin de refinanciar los bonos de 300 millones que deben vencer y captar nuevos recursos. 

José Elías, nacido en Badalona y de 49 años, tiene el 74,9% de las acciones de Audax y participaciones en más de 180 empresas, entre ellas Ezentis y La Sirena, y un patrimonio neto de unos 900 millones de euros.