Los precios de los hoteles están por las nubes y no solo en las grandes ciudades. La fuerte demanda de viajes y ocio después de la pandemia ha disparado las tarifas y el precio por dormir una noche alcanza los 158,4 euros, de media, (datos a cierre de 2024) desde los 88,5 euros que costaba en 2019, según el Barómetro de STR y Cushman & Wakefield, lo que supone un 78% más.
Por ello, alojamientos como los de easyHotel, con precios económicos, están despuntando en España. La compañía está presente en Madrid, Málaga y Barcelona, siendo este último el que mejor les funciona. “Barcelona es símbolo de nuestro mayor éxito, la joya de la corona, el mejor de nuestros hoteles”, comentaba el consejero delegado de la cadena, Karim Malak, hace unos días.
Así, la compañía -que ya cuenta con 50 hoteles en 11 países europeos- se disponen a abrir un segundo hotel en Barcelona durante el verano. En concreto, La Sagrera tiene previsto abrir sus puertas el 7 de julio con precios desde 65 euros. Desde easyHotel aseguran que su modelo gusta en el país y proyectan también nuevos hoteles en Sevilla y Bilbao. “España será en 2026 el 35% de nuestros ingresos y nuestra prioridad”.
Malak explicaba que su modelo de negocio es rentable porque tienen pocos costes, lo que les permite ofrecer precios bajos y obtener beneficios. Su objetivo, de hecho, es que el huésped se quede poco tiempo en el hotel y gaste poco en el hotel, por lo tanto, el establecimiento tiene lo imprescindible. Y su ubicación, siempre está cerca del transporte público porque no se encuentra en los lugares más turísticos.
“Se suele oír que el hotel tiene que ser el destino, que necesitamos grandes espacios de ocio, hoteles con spa, con muchos metros cuadrados… Pero yo lo que veo es más costes y más complejidad”, destacaba el CEO en la inauguración de su nuevo hotel en Madrid, donde ponía de relieve que su cadena quiere que las persona que se alojen en el hotel “pasen menos tiempo en el hotel”, que visten la ciudad donde están y permanezcan “unas seis u ocho horas en el alojamiento”.
"¿Para qué voy a gastar dinero en unos servicios que para nada voy a utilizar? Este es nuestro modelo, un hotel que no sea destino, que haga de la ciudad el destino y para ello tenemos este concepto, que es muy simple, un hotel al que vayamos a dormir, un hotel optimizado”, apuntaba.
Conforme a este concepto, los hoteles de easyHotel ofrecen “todo lo necesario para un buen descanso” pero “sin florituras”. Por poner un ejemplo, agregaba el CEO, “no tenemos minibar y esto reduce el consumo energético. Nuestros clientes pueden utilizar los bares y restaurantes de la zona, así necesitamos menos espacio”.
Por todo ello, defendía que ofrecen la mejor relación “calidad-precio”. Y resultado de todo ello es que el cliente “puede dormir en una cama de 4 estrellas sin pagar un precio de 4 estrellas”. Asimismo, Karim Malak comentaba que desde la app o web móvil “se necesitan solo 8 clics para realizar una reserva” cuando otras marcas necesitan entre 9 y 23. Y las reservas se pagan por adelantado, por lo que necesitan menos trabajadores en recepción.
Con todo, sus costes son más reducidos y esto les permite tener mayores beneficios por habitación. Desde el punto de vista financiero, destacaba también que tienen unas finanzas “sanas” y de hecho, CaixaBank ha financiado el proyecto con un préstamo de 29 millones de euros para respaldar su expansión en el mercado español.
Sus resultados les permiten ser “ambiciosos” y prevén seguir abriendo hoteles en el sur de Europa y muy concretamente en España y Portugal. “Queremos adquirir nuevos hoteles, Barcelona es símbolo de nuestro mayor éxito, la joya de la corona, el mejor de nuestros hoteles, y abriremos un segundo hotel. Pero también estamos a la espera de abrir más en Madrid, llegar a Valencia y Alicante, además de Sevilla y Bilbao. España será en 2026 el 35% de nuestros ingresos y el país es nuestra prioridad”.
Finalmente, el consejero delegado destacaba que easyHotel quiere ser un hotel local y accesible a todos los bolsillos, y por eso la prioridad de la cadena es que el hotel esté cerca del metro y en general, de un transporte público. “No es tan importante que esté en el centro de la ciudad, para nosotros lo importante es que esté bien comunicado”, concluía.