La cadena catalana de hoteles Derby, propiedad de la familia Clos, tiene sobre la mesa un proyecto para iniciar la promoción y edificación de un nuevo edificio de apartamentos en l'Hospitalet de Llobregat, que se iniciará probablemente durante 2026. Este será el segundo establecimiento de apartamentos de la marca en la segunda ciudad más importando de Catalunya, de manera que elevará de 26 a 34 el número de apartamentos. Ambos establecimientos están situados en la zona de influencia de la plaza Europa de l'Hospitalet, junto al recinto de Fira de Barcelona. "Es un emplazamiento que nos ha dado buenos réditos, no solo por la ocupación de los asistentes a ferias y congresos, sino también para turistas que encuentran una buena ubicación en camino entre la ciudad, que no les queda lejos, y las playas de los municipios de la costa sur de Barcelona", ha explicado Joaquim Clos, director de explotación de la Derby Hotels.
Sin aventurar ninguna cifra de inversión en este nuevo proyecto, Clos ha remarcado que entra dentro de la estrategia de crecimiento de la cadena, tanto en apartamentos como en hoteles de lujo. Aunque ha reconocido que, este 2025, han hecho su primera desinversión, con la venta del Hotel Banke de París, un cinco estrellas situado en un emblemático inmueble en el barrio de la Ópera, por el cual el empresario Amancio Ortega pagó 97 millones de euros.
Una parte de estos recursos se han destinado a reducir el palaquejament de Derby Hotels que está inmerso, desde hace 2 años, en una profunda reformar del hotel The Caesar, a Londres. Con una inversión total de 20 millones de euros, la compañía iniciará la segunda fase de la reforma, por un importe de 8 millones de euros, el próximo 15 de noviembre, y está previsto que se alargue 14 meses. "Después de superar la crisis económica durante la pandemia, consideraban que el apalancamiento financiero del grupo era demasiado elevado y lo hemos devuelto a los niveles que creemos aceptables para una empresa familiar como la nuestra, para que nos pueda permitir afrontar nuevos proyectos", ha manifestado Joaquim Clos, este jueves, en un encuentro informal con los medios de comunicación.

Crecer en Portugal
De hecho, la familia Clos hace un cierto tiempo que está buscando emplazamiento en Lisboa para abrir su primer hotel de lujo en la capital lusa, pero son muy exigentes en materia de patrimonio y "no estamos encontrando el edificio que nos gustaría y, además, a un precio por metro cuadrado que sea aceptable", ha admitido Joaquim Clos, que ha confirmado que acaba de volver de Lisboa, donde ha tenido oportunidad de ver algunas opciones, "pero tiene que ser un proyecto rentable, por encima de todo". En la actualidad, la cadena hotelera está formada por 12 hoteles, de los cuales 9 en Barcelona, dos en Madrid y uno en Londres, además de 9 establecimientos en régimen de apartamentos -que llegarán a 10 con el futuro edificio de l'Hospitalet.
Con respecto a la marcha del negocio, Clos ha confirmado que han revisado a la baja el crecimiento en ingresos porque "hay una desaceleración de la demanda, especialmente en la ciudad de Barcelona". "Fuimos demasiado optimistas cuando, ahora hace un año, pronosticamos que las ventas crecerían un 5% anual", sobre los 88 millones del cierre de 2024, ha concretado y ha rebajado el aumento entre el 1% y el 2%. En paralelo, el resultado operativo (ebitda) mostrará un mejor comportamiento porque la compañía ha hecho "un importante esfuerzo por mejorar la rentabilidad y creemos que se situará entre los 15 y los 20 millones de euros", ha dicho.
La cadena mantiene unos elevados niveles de empleo, "aunque sea ajustando los precios, si hace falta", y tienen como principal cliente al visitante norteamericano, en el segmento de los alojamientos de lujo. Los clientes americanos suponen al 27% de todos los usuarios de sus hoteles de lujo, a Madrid y Barcelona, series del viajero español, inglés y francés. También han destacado que, en el Top 5 de sus clientes, han alcanzado la quinta posición los chinos.
El director de explotación de Derby ha argumentado que el grupo no percibe, hoy por hoy, menos afluencia de visitantes norteamericanos. "No veo que sea un mercado que se tenga que ralentizar", ha dicho Clos, que igual que hizo ayer el Gremio de Hoteles de Barcelona ha alertado de la afectación negativa para el turismo de negocios, que puede tener un incremento sustancial de la tasa turística.