El Ibex-35 ha iniciado la última sesión del año con una caída del 0,24%, situándose en los 17.313,8 puntos. Esta mínima corrección no aleja, sin embargo, al índice de su ruta de máximos históricos, ya que el día anterior había cerrado en niveles sin precedentes. En Europa, la sesión se desarrolla con la ausencia de dos mercados clave: Fráncfort y Milán han cerrado por las fiestas. En el resto, París perdía un 0,26%, mientras que Londres se apuntaba un ligero incremento del 0,05%.

El euro, por su parte, se depreciaba un 0,1% frente al dólar. La tendencia a la baja en el Estado responde, en buena parte, a la bajada de Wall Street en la sesión anterior. Los principales índices estadounidenses cerraron con pérdidas modestas: el Dow Jones cedió un 0,2%, el S&P 500 un 0,1% y el Nasdaq Composite un 0,24%. Además, los futuros sobre estos índices se mostraban a la baja en la mañana europea, cogiendo una pausa tras la publicación de las actas de la última reunión de la Reserva Federal.

El documento del banco central estadounidense revelaba el consenso mayoritario para mantener una política monetaria muy flexible, apoyada en un diagnóstico económico todavía frágil. Los miembros del Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC) destacaron la moderación en el crecimiento, el aumento de las presiones inflacionistas y un cierto empeoramiento en los datos de ocupación. Este escenario justifica su decisión de mantener los tipos de interés en mínimos históricos y continuar con las inyecciones de liquidez.

El mercado asiático también ofrecía un panorama irregular y con ausencias significativas: Tokio y Seúl han cerrado. En China, el índice de Shanghái ha avanzado un modesto 0,09%, sostenido por el optimismo que generaron los datos del índice de gestores de compras (PMI) para los sectores servicios y manufacturero en diciembre, que salieron por fin de un terreno contractivo (por debajo de 50 puntos) y mostraron signos de estabilización. En cambio, Hong Kong ha sido el gran derrotado de la región, con una caída del 0,87%.

Cuanto a la agenda económica de hoy, destacarán las peticiones semanales de subsidio de paro en Estados Unidos, un dato siempre vigilado por los inversores para medir la salud del mercado laboral norteamericano. Los mercados europeos abiertos y Wall Street tendrán hoy sesiones reducidas en anticipación a la Nochevieja. En el desglose del Ibex-35, el protagonismo se ha centrado en Ferrovial, que se ha dejado un 1,08%. La compañía de infraestructuras ha sido seguida por ACS (-1,05%), Unicaja (-0,79%), Mapfre (-0,65%) y Acciona (-0,64%). Entre los grandes valores del selectivo, Inditex también ha sufrido, cediendo un 0,53%. En el sector financiero, Banco Santander ha perdido un 0,47% y el BBVA un 0,3%.

En el lado positivo, los valores que han ejercido de puntal para contener las pérdidas del selectivo han sido Iberdrola y Telefónica. La multinacional eléctrica se ha revalorizado un 0,54%, mientras que la operadora de telecomunicaciones ha avanzado un 0,26%. Otros avances notables han sido los de Repsol (+0,09%), Naturgy (+0,23%), Banc Sabadell (+0,16%) y Redeia (+0,13%). Fuera del selectivo, en el mercado continuo, las atenciones se han centrado en el fuerte movimiento de Prisa, que ha caído un 4%, y en el salto del 5,76% de Amper, después de que esta última anunciara la venta de una parte del capital de una de sus filiales.

En el mercado de deuda soberana, el interés de los bonos españoles a diez años se ha mantenido estable respecto al cierre del día anterior, situándose en el 3,285%. La prima de riesgo se mantiene sin cambios en los 43,2 puntos básicos, reflejando una percepción de riesgo controlada por los inversores. En el ámbito de los activos digitales, el bitcoin se ha recuperado ligeramente tras unas sesiones volátiles, apuntando una subida del 0,35% para situarse en los 28.498 dólares. Más allá de los movimientos técnicos de una sesión concreta, el verdadero protagonista es el balance de año completo. Este ligero descenso inicial no empuja en absoluto al índice español de su trayectoria de recuperación espectacular. Desde el 1 de enero, el Ibex-35 acumula unas ganancias del 49,32%, una cifra que lo sitúa entre los índices europeos más rentables del año.