Un temporal de levante sacudirá Catalunya por Sant Esteve con tormentas rabiosas, ventoleras y más nieve

El día de Navidad más frío de los últimos años ha llegado a Catalunya con algunas sorpresas meteorológicas en forma de nevadas a cotas bajas. Durante la mañana de este jueves, muchas regiones del sur, como el Priorat, la Terra Alta o el Parque Natural de Els Ports se han levantado con algunas capas de nieve por debajo de los 600 metros que han dejado una postal plenamente invernal. Los copos de nieve también han visitado ciudades como Lleida y Falset, donde los termómetros no han superado los 5 o 6 °C en toda la jornada. El embolsamiento de aire frío en altura situado en el suroeste de la Península configurará un temporal de levante para el día de Sant Esteve, que amenazará las comarcas de Girona con tormentas y lluvias intensas. Los vientos fuertes supondrán una gran alteración del mar, con olas de más de 7 metros en el Cap de Creus. El anticiclón del norte del continente viajará hacia el sur entre sábado y domingo y el fin de semana acabará con una mejora del tiempo, sol y bonanza. 

El tiempo en Catalunya: pronóstico para el viernes, 26 de diciembre

La situación meteorológica para el día de Sant Esteve anuncia una jornada muy inestable, protagonizada por un temporal de levante que sacudirá las comarcas de Girona. La llegada de masas de aire húmedas desde el Mediterráneo a Catalunya hará que el cielo quede bien tapado en todo el país durante todo el día. Las lluvias no darán tregua y podrían volver a afectar muchos puntos del territorio en diversos momentos, con intensidades débiles o moderadas. En la mitad oeste de la geografía, las precipitaciones serán intermitentes, con algunos ratos en los que podremos cerrar el paraguas, pero en el levante de Catalunya serán más continuadas y persistentes, con acumulados moderados de entre 10 y 40 litros. El protagonista de este episodio será el extremo noreste del país, especialmente las comarcas gerundenses, donde podrían descargar aguaceros fuertes o torrenciales, que dejarían acumulados muy abundantes de lluvia que localmente podrían superar los 100 litros. No se descartan algunas tormentas durante la segunda mitad del día en estas regiones.

Las nevadas serán bastante generosas en todo el Pirineo. Durante la mañana, podríamos registrar algunos copos de nieve en la Vall d'Aran o el Pallars Sobirà, pero el grueso de nieve de este episodio lo recibirá el Pirineo oriental, preferentemente las comarcas de la Cerdanya y el Ripollès, con grosores de hasta un metro de nieve nueva por encima de los 2000 metros. La cota de nieve se quedará alrededor de los 1500 metros, aunque en los valles pirenaicos podría bajar hasta los 1000 metros. Cabe destacar que la nieve llegará a algunas comarcas tarraconenses a cotas bajas, alrededor de los 700 metros de altura, y podríamos ver algunas capas de nieve en la Terra Alta. Viento de levante muy fuerte en la Costa Brava, con ráfagas de más de 60 km/h que traerán un gran recorrido marítimo y supondrán un temporal de mar con olas superiores a los 6 metros de altura. Viento del este moderado en la costa central, con olas que rozarían los 3 metros en las playas de Barcelona. Por otro lado, el mistral soplará en el extremo sur con menos intensidad que los últimos días. Los termómetros subirán un poco en todo el país, con máximas que rondarían los 12 o 13 °C en el litoral y prelitoral, mientras que en el interior tendremos un ambiente invernal y será difícil alcanzar los 10 °C: atención a las heladas en el interior de Tarragona. Habrá poco contraste térmico entre el día y la noche por la cobertura densa de nubes. 

El tiempo en Catalunya: previsión para toda la semana

La atmósfera se mantendrá inestable durante el próximo sábado, con un temporal de levante que no querrá marcharse de Catalunya, pero que ya irá a la baja. La nubosidad será bastante abundante y el cielo todavía estará bien tapado, aunque podrían abrirse algunos claros durante la tarde en el Pirineo occidental. Las precipitaciones seguirán siendo las protagonistas durante toda la jornada, con lluvias débiles o moderadas que, en general, dejarán acumulados poco abundantes. De hecho, el cuadrante noroeste del territorio podría quedar libre de agua después de muchos días de paraguas. Los chubascos serán más intensos en el litoral, especialmente en la mitad norte, aguaceros locales y algunas tormentas en la Costa Brava. No podemos bajar la guardia, ya que lloverá sobre mojado y tendremos que estar pendientes de las posibles inundaciones. Más nieve en el norte, con cotas medias en el Pirineo oriental y enharinadas en el sector occidental de la cordillera. Se esperan grosores de nieve superiores al medio metro en cotas altas de las montañas del Ripollès. El viento del este todavía soplará con fuerza durante la mañana, pero irá a menos durante la tarde y a la vez pasará a soplar del noreste. Persistirá el temporal marítimo, con olas importantes en la costa de Girona.

El viento de gregal traerá lluvias débiles o moderadas durante el próximo viernes en las comarcas del Ebro y puntos de la Costa Dorada, donde la atmósfera quedará más tapada durante toda la jornada. Intervalos de nubes medias e inofensivas en el tercio central que ofrecerán un cielo variable y libre de precipitaciones tras muchos días de inestabilidad. Clara mejora del tiempo en el Pirineo, que disfrutará de una jornada de sol y bonanza. La temperatura subirá en todo el país, con máximas que rozarán los 16 o 17 °C en el litoral de Barcelona. La semana próxima llegará con calmas y una configuración anticiclónica que se manifestarán con muchos ratos de sol y algunas nubes altas. La falta de viento en el interior y el aire húmedo, así como las temperaturas más bajas durante la madrugada, permitirán la formación de bancos de niebla densos y persistentes en Ponent. Estas regiones vivirán días más fríos y húmedos, con menos ratos de radiación solar y mercurios que a menudo no superarán los 10 °C. A partir del martes, llegará el viento de mistral y tramontana a Catalunya y nos hará llegar masas de aire gélidas secas del norte de Europa. Los termómetros irán de bajada entre el martes y el miércoles, con valores bastante por debajo de los registros habituales de la segunda quincena de diciembre. La entrada de aire más frío supondrá un aumento de la inestabilidad y la formación de nubes bajas en toda Catalunya, aunque las precipitaciones aún se mantendrán al margen.