Kone, multinacional del sector de los ascensores, escaleras mecánicas y puertas automáticas, ha alcanzado un importante hito. Lo ha hecho, además, con 18 meses de antelación sobre lo previsto: ha logrado que todos sus centros de producción sean neutros en carbono.
Diez fábricas en siete países
La empresa Kone cuenta actualmente con diez unidades de fabricación repartidas en siete países alrededor del mundo. Todas ellas han puesto en marcha actividades para reducir las emisiones de alcance 1 – las emisiones directas producidas como resultado de su actividad – y de alcance 2 – las emisiones indirectas generadas por la electricidad consumida y comprada – en un 71% respecto a los valores por con base 2018. “Nos sentimos muy orgullosos de haber conseguido un hito tan importante y pionero, y de hacerlo 18 meses antes de lo previsto” explica Giovanni Lorino, director general de KONE Ibérica & Italia. “El camino hacia la neutralidad de carbono es largo y gradual. Sin embargo, logros como este son el punto de partida que nos llevará a continuar mejorando las operaciones propias de KONE, así como en nuestros productos y en la cadena de suministro”, añade.
Ambiciosos objetivos climáticos para 2030
En 2020, Kone anunció sus objetivos climáticos para reducir significativamente las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) de cara a 2030. La empresa ha sido la primera del sector de ascensores y escaleras mecánicas en establecer objetivos climáticos ambiciosos, validados previamente con la iniciativa Science Based Targets (SBTi).
El compromiso de la empresa es reducir las emisiones de sus propias operaciones hasta en un 50%. Eso incluye las emisiones directas de gases de efecto invernadero que se producen a partir de recursos controlados o propios de la empresa, como los vehículos, y las emisiones indirectas de gases de efecto invernadero asociadas a la electricidad adquirida, la calefacción o la refrigeración antes de 2030, frente a la base de referencia de 2018.
Además, Kone pretende conseguir una reducción del 40% en las emisiones relacionadas con los materiales de sus equipos y en el consumo de energía durante la vida útil de los mismos en el plazo fijado. Las acciones que se desarrollan para lograr dicho cumplimiento permiten a los clientes reducir su propia huella de carbono y contribuir a una mayor sostenibilidad en las cadenas de suministro.