Hasta 16 aeropuertos nacionales estadounidenses entre los que se cuentan aeródromos de ciudades como Chicago, Boston, Detroit, Miami o Salt Lake participan estos días en los ensayos que la TSA, la entidad que gestiona en USA la seguridad del transporte aéreo, está realizando con un sistema de reconocimiento facial. Si funciona bien, la TSA lo extenderá al resto de aeropuertos estadounidenses. De momento, sólo se usaba en aeropuertos internacionales y con extranjeros. En España, sólo en controles fronterizos y en aeropuertos internacionales, se quiere poner en marcha un sistema similar en 2023.

reconocimiento facial
 

 

¿Cómo funciona?

La tecnología que se utiliza funciona de manera similar a la que usan los smartphones que se desbloquean mediante el reconocimiento fácil del usuario, pero comparando la imagen que obtiene la cámara con la que aparece en los documentos de identificación que presenta el usuario al sistema. Si las dos imágenes casam, el usuario puede pasar y, si no, se queda en tierra. Según la TSA, los cambios de peinado, pequeñas cirugías y similares no afectan al sistema. “Su impacto es insignificante”, dicen. Con todo, desde el Instituto Nacional de Ciencia y Tecnología Federal, se advierte que, según un estudio de 2019, estos sistemas de verificación son hasta 100 veces menos precisos cuando el sujeto pertenece a un grupo “minoritario”.

Participación voluntaria

Por el momento, la TSA permite que la verificación mediante el sistema de reconocimiento facial sea voluntaria, pero advierte que si se prefiere el método tradicional, en el que participa un agente, el tiempo de espera será mayor. Los datos que se recaban, promete la TSA, no se utilizarán con fines policiales.