¿Crees que con comprarte un coche eléctrico lo tienes todo hecho para empezar a ahorrar? En realidad, y mucho menos en un país con una limitada red de puntos de recarga, no es así. Hoy, en España, comprar un coche eléctrico supone, también, instalar un punto de carga en casa. Y hacerlo no es sencillo ni barato. Por suerte, hay subvenciones.

¿Cuánto cuesta uno?
La red de carga pública es en España deficiente y, por ello, el coste de un punto de recarga instalado en tu domicilio es algo que vas a tener que añadir a los entre 25.000 y 40.000 euros que cuesta un coche de este tipo. Instalar un punto de recarga supera en coste los 1.000 euros y no suele superar los 1.500.
Moves III
Muchas marcas ofrecen promociones para, cuando compras un vehículo, instalar un punto de recarga en tu domicilio. Alguno, incluso, hasta te lo regala, pero no siempre es así. Queda, entonces, la opción de acudir a una empresa instaladora. Aquí, por supuesto, conviene conocer las ayudas disponibles. En el Plan Moves III, por ejemplo, se subvenciona con 317 euros la instalación asociada a un punto de este tipo y con 201 cada punto que se instala. Existe, además una deducción del IRPF. El resultado es que ahorrarás 470 euros. Hay, sin embargo un problema, como en todo el Plan Moves III: primero, la inversión la haces tú. Las subvenciones llegarán después si has hecho todos los trámites correctamente. ¿Sigue teniendo lo del coche eléctrico cierto aspecto de broma pesada? En todo caso, lo cierto es que, si quieres aprovechar todas las bonificaciones y ayudas, casi conviene hacer un máster. Probablemente, por eso en España estemos muy por detrás de otros países en lo que a porcentaje de coches eléctricos sobre el total se refiere.