La Fiscalía no ha pedido medidas cautelares para ninguno de los cuatro investigados por el delito de sedición por las manifestaciones del 20 y 21 de septiembre, tras las detenciones de los 14 cargos públicos, entre los que se encontraban los cerebros del referéndum.

Josep Lluís Trapero, Jordi Sánchez y Jordi Cuixart, ya han salido de la Audiencia Nacional y ahora están pendientes de una nueva citación. Trapero es el único que ha hecho una declaración extensa. Jordi Sánchez sólo ha respondido a las preguntas de su abogado, y Jordi Cuixart ha negado a declarar porque, según explicó a los medios, "no reconoce la competencia del tribunal".

El Fiscal Miguel Ángel Carballo ha presentado un informe de última hora de la Guardia Civil que ha provocado que ahora todas las partes deban estudiar, por este motivo, no se ha hecho ninguna vista sobre medidas cautelares.

Aunque la Fiscalía pidió suspender las declaraciones, la juez se ha negado y se han hecho las comparecencias.

Con todo, la juez volverá a citar a declarar, como mínimo, Jordi Sánchez y Jordi Cuixart, una vez se haya revisado toda la documentación. No está claro que Trapero tenga que volver a la Audiencia Nacional, pero, hoy por hoy, tampoco se puede descartar.

La declaración de Trapero

Trapero ha marchado pasadas las 11h, tras declarar durante aproximadamente una hora.

La Fiscalía no ha pedido medidas cautelares para el Mayor de los Mossos ha explicado a la juez su versión de los hechos "que difiere mucho de la de la Guardia Civil", y que es la única que tenía hasta ahora la magistrada, según ha podido saber ElNacional de fuentes judiciales.

El Mayor de los Mossos también ha transmitido a la juez que lo más normal es que los Mossos hubiera sabido con anterioridad lo que teníamos que hacer y no por los medios de comunicación.

Teresa Laplana, la intendente responsable del dispositivo del referéndum, que compareció por videoconferencia por motivos de salud, se ha negado a declarar. Fuentes judiciales han explicado que ha estado bajo supervisión médica por ansiedad.

En un comunicado de prensa, los Mossos han remarcado que su actuación el 1-O "fue la correcta y necesaria". "Los Mossos no fueron avisados con suficiente antelación para poder planificar el dispositivo y esto obligó a irlo adaptando", se insiste. 

Por eso, Trapero ha declarado a la jueza que los Mossos no cometieron "ningún delito de sedición, ni participaron ni colaboraron de ninguna forma en la comisión de este delito ni tampoco de ningún otro". El cuerpo entiende que "puedan haber percepciones diferentes sobre el dispositivo policial por parte de la Guardia Civil" porque "también la forma de afrontar temas de orden público se plantea de manera diferente en ambos cuerpos".

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Las llegadas

A las diez en punto de 9 llegaba el mayor de los Mossos, Josep Lluís Trapero, acompañado por sus manos derechas, los comisarios Ferran López y Joan Carles Molinero. Teresa Laplana, la intendente responsable del dispositivo del referéndum, no ha venido hasta Madrid. Por motivos de salud acreditados, y aceptados por el juez, Laplana declara por videoconferencia desde Barcelona.

 

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Trapero, Laplana y los presidentes del ANC y Òmnium, Jordi Sánchez y Jordi Cuixart, estaban citados a las 9h. Minutos después de llegar el major de los Mossos, lo ha hecho, primero, Sánchez y, después, Cuixart, acompañados por sus abogados que llegan a ciegas a la declaración ya que no han tenido acceso al atestado policial de la Guardia Civil que tiene desde hace días la jueza.

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El major de los Mossos, Josep Lluís Trapero lleva toda la información sobre las actuaciones que la policía catalana llevó a cabo en el dispositivo del 20 de septiembre. También alegará ante la jueza que en todas las intervenciones de las últimas semanas relativas al referéndum del 1-O, suspendido por el Tribunal Constitucional, los Mossos han cumplido "estrictamente" las órdenes judiciales y de la Fiscalía, "con el máximo rigor y profesionalidad".

Cerrando el paso

El amplio despliegue policial ha hecho que los diputados que hoy iban a apoyar a los imputados, se lo hayan tenido que mirar detrás de las vallas. No han podido acompañar hasta la puerta a Jordi Sánchez y Jordi Cuixart, como sí lo hicieron hace un año, en el juicio a Francesc Homs en el Tribunal Supremo, unos metros más abajo.

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Seguridad extrema

Delante de un impresionante dispositivo de seguridad, Trapero, Jordi Sánchez y Jordi Cuixart, han atravesado la calle Garcia Gutiérrez donde se encuentra la Audiencia Nacional, después de desencochar en la calle Gènova.

La policía ha blindado todas las calles de acceso a la Audiencia Nacional y a algunos periodistas les han hecho abrir la mochila en medio de la calle. "Eso no se veía desde los tiempos de ETA", comentaban algunos de los redactores de tribunales más veteranos que vivieron los procesos contra los terroristas a los mismos juzgados donde hoy se investiga el delito de sedición.

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