Los partidos de la oposición han pedido este lunes que el Govern aplace un año la decisión de avanzar el inicio del calendario escolar. Así lo han pedido a la Comisión de Educació el PSC, Vox, comunes y Ciudadanos. La CUP, aunque no ha solicitado que esta modificación del calendario se produzca el curso 2023-2024 y no el 2022-2023, ha cargado duramente contra el conseller Cambray por esta cuestión. Según los anticapitalistas, se trata de una medida que en ningún caso ayuda a los niños más vulnerables, y que tampoco permite la conciliación de la vida laboral con la familiar. La diputada Nogay Ndiaye ha señalado, además, que si es verdad que es positivo que los niños hagan menos vacaciones de verano, recortar solamente cinco días de vacaciones pasa a ser una medida con pocas consecuencias en los alumnos.

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De esta manera, pues, los partidos de la oposición han cerrado filas con el Consell Escolar, un órgano consultivo del Departament de Josep Gonzàlez-Cambray que hace dos semanas emitió un informe no vinculante en el cual instaba al Govern a avanzar el inicio del curso escolar a partir del 2023-2024. El Departament d'Educació, sin embargo, no tiene ninguna obligación de hacer caso a este informe. Y todo indica que no hará ningún caso. Este lunes Cambray ha vuelto a insistir en la misma idea: si todo el mundo pide un aplazamiento, es porque la comunidad educativa quiere discutir 'el cómo', pero no 'el qué'; cosa que, según él, significa que todo el mundo está de acuerdo que se trata de una buena medida. Y las buenas medidas, también según él, no se pueden aplazar.

Huelga de profesores

Cambray ha comparecido en esta comisión del Parlament a petición propia, y aprovechando que en las últimas semanas miles de profesores se han manifestado en la calle, ha querido abordar esta cuestión. Respecto del calendario, ha insistido en que el adelanto del calendario escolar "no afecta a los derechos laborales" de los docentes catalanes porque "durante septiembre tendrán tiempo para prepararse el curso, y en junio también". Por otra parte, ha asegurado que su conselleria tiene la intención de llegar a un acuerdo con los sindicatos que estas últimas semanas han llenado Barcelona de manifestantes.

De hecho, ha lamentado que hasta ahora no se haya podido llegar a un acuerdo, ya que "de las 14 demandas" que hace el comité de huelga, el Departament "da respuesta a 10". "Y en siete de ellas damos respuesta este mismo curso 2022-2023, las otras se hacen durante la legislatura", ha asegurado el conseller. Hay que recordar, sin embargo, que la última propuesta que hizo Educació -avanzada por ElNacional.cat- fue considerada como insuficiente por los sindicatos.

Por otra parte, Cambray ha querido dejar bien claro que el descontento de los profesores se puede interpretar, en buena manera, por el hecho de arrastrar ya dos años de pandemia. Los maestros y docentes han tenido que dar clase a distancia y después enfrentarse al virus con aulas llenas de niños. "Se ha hecho un trabajo para mantener las escuelas abiertas y seguras; entendemos que eso no es tan fácil y entendemos este cansancio en el sistema educativo", ha manifestado. Además de entender que los profesores se quejen del arrastre de los recortes. Ahora bien, también ha querido dejar claro que la Generalitat ha dado pasos en los últimos años para revertirlas. En este sentido, ha sacado pecho de los últimos presupuestos del Govern, que contemplan la partida "mayor destinada nunca a Educació".

Lengua

Cambray también ha salido en defensa de la modificación de la Ley de Política Lingüística (LPL) pactada entre ERC, JxCat, PSC y Comunes, que contempla el castellano como lengua de uso vehicular en Catalunya. El conseller d'Educació ha dicho -en referencia a la sentencia del 25%- que la cuestión de la lengua "no puede ir de porcentajes". Según el jefe del Departament, "no hay un problema de lengua en las escuelas" pero sí que hay "una bajada del uso del catalán, y se tiene que incrementar". En este sentido, ha asegurado que una buena medida es la que ha propuesto su Govern, que los centros educativos den respuesta a los usos lingüísticos de cada entorno.