La Organización Internacional para las Migraciones (OIM), asociada a las Naciones Unidas, reclama que los migrantes rescatados en el mar, como los del Open Arms, puedan desembarcar de manera "digna" y "predictible". "Lo más importante tiene que ser salvar la vida de las personas en peligro en el mar", asegura a su director regional para Europa, Ola Henrikson.

En una entrevista en la ACN sobre los casi 20 días que tuvo que pasar el barco de la ONG catalana sin poder llegar en un puerto seguro, Henrikson admite que esta crisis "no es una buena señal" y defiende que hay que encontrar "una solución sostenible" en el Mediterráneo. Por eso, la OIM urge a "todos los estados implicados" a "cooperar" para hacer frente esta situación.

El bloqueo del Open Arms durante 19 días en las costas de Lampedusa, en Italia, desembocó en un enfrentamiento entre la ONG, el gobierno italiano y español. La entidad criticó que Roma impidiera el desembarque de los casi 15 rescatados y que Madrid tardara más de 15 días al ofrecer un puerto seguro. A su vez el ejecutivo socialista de Pedro Sánchez recriminó a la organización haberse negado a desembarcar.

El representante europeo de l'OIM evita entrar en los "detalles" de esta polémica, pero asegura que esta problemática ha puesto de manifiesto que hay que forjar acuerdos "robustos y predictibles" sobre la gestión de los desembarques entre los estados de la Unión Europea.

Acoger migrantes, responsabilidad de la UE

Durante la crisis, el Gobierno se negó a dar la imagen que España sea "la única que salva vidas" en el Mediterráneo y protestó que la acogida de los rescatados por el Open Arms era "responsabilidad de la Unión Europea" en su conjunto.

Al respecto, Henrikson niega que se tenga que culpar unos u otros" por "la falta de soluciones" en el asunto migratorio y de asilo. "Todos los estados implicados e instituciones en Bruselas tienen que ir a la una e intentar encontrar soluciones sostenibles y predictibles", defensa Henrikson.

Desde l'OIM reiteran que están a disposición de los países europeos para asistirlos en "cualquier solución que acuerden siempre que sea compatible con sus obligaciones con respecto a los derechos humanos". "Tenemos que defender los derechos humanos que tienen todos los migrantes implicados", enfatiza Henrikson.

Las llegadas de migrantes caen un 27%

Las llegadas de migrantes a las costas europeas han disminuido un 27% con respecto al año pasado. En el caso de España, han caído hasta un 50% y, en el de Italia, hasta un 72%. El descenso, sin embargo, no es generalizado en el Mediterráneo. Las llegadas de migrantes a Grecia han crecido un 29% con respecto al 2018.

En España, la mayoría de los migrantes llegan a través del mar. De las 19.342 llegadas irregulares que ha habido hasta septiembre, 15.718 han estado a través del mar y 3.624 por tierra. De enero a septiembre, han sido 15.718 las personas que han llegado a España y 229 las que han muerto intentándolo. El año pasado hubo 32.022 llegadas, con 444 personas que murieron intentando atravesar el mar.

Nueva Comisión Europea

La nueva Comisión Europea de Ursula Von der Leyen heredará el próximo 1 de noviembre el endémico conflicto sobre la gestión de los refugiados e inmigrantes. Una patata caliente que el ejecutivo saliente no pudo resolver ante las divisiones internas entre los estados, que retienen la mayor parte de competencias en esta área.

Ahora, la OIM confía que la Comisión de Von der Leyen siga trabajando para modelar un acuerdo migratorio y de asilo entre todos los países del bloque respetando "los derechos humanos" y "el multilateralismo".

De cara a encontrar soluciones de consenso en Europa, Henrikson apuesta por impulsar la migración "regular y ordenada" para aprovechar "las ventajas", así como trabajar conjuntamente con los países vecinos de las rutas migratorias.