A partir de este jueves 23 de septiembre, el ocio nocturno podrá volver a abrir, aunque solo en espacios interiores y hasta las tres de la madrugada. Además, los locales tendrán media hora más para poder desalojar a los clientes. Así lo ha aprobado hoy lunes el Procicat.

Este es solo el primer paso de la reapertura que pide el sector del ocio nocturno, uno de los más afectados por las restricciones para controlar la covid, después de más de 18 meses cerrado. Con todo, sin embargo, de momento los interiores de los locales continuarán cerrados a la espera de la evolución de la pandemia. Según demuestran los indicadores epidemiológicos, ahora mismo esta parece controlada.

También a la restauración

La relajación de las medidas anticovid también afectarán la restauración, ya que verá ampliado su horario de apertura. A partir del jueves, podrán alargarlo hasta la 1 de la madrugada, solo 30 minutos más de lo que podían abrir hasta ahora, ya que a las 00:30 los clientes deben abandonar los locales.

El ocio nocturno había pedido en reiteradas ocasiones a la justicia que tumbase la decisión del Govern de mantenerlo cerrado. Pero incluso, cuando el TSJC eliminó el toque de queda, el tribunal avaló la decisión del Ejecutivo de mantener cerrados estos espacios de ocio por su posible impacto encima de la pandemia, ya que se interpreta que pueden ser un posible foco de contagios, especialmente entre la gente joven.

Batallas judiciales

Para demostrar su malestar con la gestión del Ejecutivo y reclamar su apertura después de muchos meses de cierre, varios empresarios relacionados con el mundo del ocio nocturno organizaron una acampada en la plaza Sant Jaume, delante de la Generalitat, e incluso algunos empezaron una huelga de hambre.

En la otra banda de la plaza, desde el Ayuntamiento, la alcaldesa Colau se había mostrado favorable a su apertura para intentar evitar botellones como los que se dieron durante las fiestas de Gracia, Sants o este fin de semana en la UAB. Finalmente, la primera pasa hacia la reapertura se hará coincidiendo con las fiestas de Mercè.

Según explicó el Govern al principio de mes, la intención era mantenerlo cerrado hasta que las UCIs se acabaran de vaciar, bajante de los 100 ingresados críticos. Ahora mismo, según la última actualización de datos del deparatament de Salut, hay 204 pacientes a las unidades de cuidados intensivos.