Un equipo interdisciplinario de nueve investigadoras catalanas se embarcarán en el proyecto Hypatia I, que simula un viaje tripulado al planeta Marte. Se trata de una misión en la estación Mars Research Desierto Station (MDRS); una instalación en el desierto de Utah, en los Estados Unidos, que recrea las condiciones del planeta rojo, y donde trabajarán entre el próximo domingo 16 de abril y el 29 de abril para hacer investigación científica para futuras misiones en Marte y también para visibilizar a las mujeres en la ciencia y en el espacio. El nombre del proyecto, Hypatia I, es un homenaje a Hipatia de Alejandría, filósofa, matemática y astrónoma del siglo V, considerada una de las pioneras en la historia de las mujeres en la ciencia, según ha explicado la comandante de la misión, la astrofísica Mariona Badenas-Agustí, en una rueda de prensa en la Llotja de Mar de Barcelona.

Badenas, que también es doctoranda en Ciencias Planetarias en el Massachusetts Institute of Technology (MIT), ha señalado precisamente que la poca representación de la mujer en cualquier disciplina de conocimiento es un hecho "muy grave" y ha afirmado que la misión busca fomentar las vocaciones científicas entre chicas y jóvenes para que vean "referentes próximos" de varias edades y perfiles. "Es la diversidad la que nos hace avanzar en ciencia", ha apuntado la astrofísica. Las otras integrantes de la misión serán la bióloga y divulgadora Carla Conejo; la matemática e investigadora en el NASA Goddard Space Flight Center, Ariadna Farrés; la bióloga e investigadora distinguida en el Instituto de Ciencias del Mar, Laia Ribas; la periodista Núria Jar; la física e investigadora ICREA en el Instituto de Microelectrónica de Barcelona, Neus Sabaté; la ingeniera en Airbus Cesca Cufí; la Product Owner y analista de datos en Scopely, Anna Bach, y la estudiante de Física e Ingeniería Mecánica y Electrónica Helena Arias.

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Las 9 investigadoras que formarán parte de la misión Hypatia I y vivirán durante dos semanas como astronautas en el desierto de Utah. Foto: ACN

Un viaje a Marte dentro de la Tierra

La misión se desarrollará en una base pequeña y aislada en un "lugar remoto del desierto de Utah", que tiene unas condiciones climáticas y geológicas similares a las del planeta rojo, según ha explicado la bióloga Carla Conejo. Así, las investigadoras vivirán durante dos semanas como si fueran astronautas en Marte, y, de hecho, para salir al exterior de la estación se tendrán que equipar con el traje de astronauta y su movilidad estará limitada. Tampoco podrán comunicarse de forma síncrona con la Tierra y tendrán unas horas concretas para conectar con el control de misión. Además, se alimentarán con comida deshidratada, que tendrán que racionar en el tiempo, y también tendrán que gestionar adecuadamente el agua, que necesitarán para beber, cultivar el huerto y para la higiene, en este orden, según ha remarcado la bióloga. También tendrán que estar preparadas para hacer frente a situaciones de emergencia.

Durante este periodo, las integrantes de la misión llevarán a cabo varios proyectos de investigación con aplicaciones en un posible viaje real a Marte. Por ejemplo, estudiarán cómo instalar GPS para moverse alrededor de Marte y mantener comunicación con la base o como generar baterías a base de hierro presente en el planeta y utilizando su orina para obtener energía. También investigarán el organismo unicelular Physarum polycephalum, conocido como 'Blob' y se harán actividades de divulgación de la ciencia y el universo. En este sentido, la periodista Núria Jar ha reivindicado que la misión busca "cambiar la narrativa y que la ciencia también la expliquen las mujeres".

La iniciativa tiene un coste global de unos 50.000 euros y cuenta con el apoyo de la Generalitat, la Fundació Catalunya La Pedrera, la Fundación Banco Sabadell, el Massachusetts Institute of Technology, el Google, la Nasa, el ICREA, la Fundación Catalana para la Investigación y la Innovación, isardSAT, la Cambra de Comerç de Barcelona, el CSIC y Airbus, entre otros. La idea de sus impulsoras es que esta misión a la estación análoga de Marte tenga continuidad con nuevas tripulaciones cada dos años, de manera que Hypatia II viaje al planeta rojo en el 2025.