Los inquilinos del número 3 de la calle Correu Vell en el Barrio Gótico han sobrevivido al tercer intento de desahucio. Este bloque -donde viven 23 personas, entre las cuales cuatro menores y dos embarazadas- fue ocupado el pasado enero con motivo de protesta contra la especulación inmobiliaria que tiene una afectación especial en este barrio barcelonés.

Sobre las nueve de la mañana de este martes, los Mossos d'Esquadra han procedido ha desalojar el edificio. Todo el operativo estaba preparado pero la numerosa concentración de vecinos en las puertas del bloque ha imposibilitado realizar el desahucio con garantías. El juzgado que lleva el caso ha dado de margen hasta este miércoles para desalojarlo, de manera que la policía todavía está a tiempo de volver a intentar vaciar y recuperar el inmueble.

Una de las peculiaridades de este bloque ocupado justo en medio del Gòtic es la diversidad de sus inquilinos. Entre la veintena de personas que viven allí hay dos familias con niños en riesgo de exclusión social, jóvenes y adultos sin otra alternativa residencial.

Un fondo de inversión adquirió la finca -que consta de nueve pisos y dos locales- a finales del 2016. Según explica la plataforma Resistim Gòtic, los nuevos propietarios echaron a los inquilinos, algunos con más de 30 años viviendo en el edificio, a base de todo tipo de chantajes.

Andrés ha sido uno de los más de treinta vecinos que se han sumado a la concentración para evitar el desahucio. "Se trata de una acción de supervivencia. Los inquilinos necesitan poder acceder a una vivienda digna", asegura.

Los inquilinos han intentado negociar con la propiedad con el fin de poder llegar a un acuerdo pero señalan que no han recibido respuesta y que incluso, los propietarios habrían contratado los servicios de una empresa especializada en desalojos con el fin de echarlos de la finca.