Un grupo de tres jóvenes que el sábado fue de excursión en moto al pantano de Susqueda encontró un kayak medio hundido y con "tres o cuatro" piedras de grandes dimensiones en el centro. Según ha explicado Otto Heller, uno de los testigos que este jueves se ha desplazado hasta el pantano para indicar el punto exacto donde encontraron el kayak, ha explicado que vieron "un objeto flotando" en el agua, del cual sólo sobresalían las puntas y tenía forma de "uve".

"Lo llevamos hasta el embarcadero, sacamos las piedras que había pero vimos que estaba pinchado y lo volvimos a dejar", ha indicado. El lunes por la tarde, ataron cabos que podía ser el kayak de la pareja del Maresme y llamaron al teléfono de emergencias 112. El sargento de los Mossos d'Esquadra del ABP de Santa Coloma de Farners, Enric Padró, asegura que "no está confirmado" que en el centro del kayak de la pareja hubiera piedras ni tampoco revela si estaba pinchado.

El joven, vecino de Santa Cristina d'Aro (Baix Empordà), ha explicado que el sábado salió de excursión en moto con dos amigos y fueron hasta la zona del embarcadero del pantano de Susqueda para bañarse. Poco después de las doce del mediodía, vieron "un objeto que flotaba" en el agua. Nadando, se acercaron y resultó ser un kayak medio hundido.

Según ha detallado Heller, el kayak estaba a escasos diez metros del final del embarcadero. Sólo se veían las puntas de la embarcación, que tenía forma de "uve". En el centro del kayak, ha seguido explicando el joven, había "tres o cuatro piedras de grandes dimensiones". "Las sacamos entre los tres y nos costó bastante, pero vimos que el kayak estaba pinchado y lo volvimos a dejar en el agua", ha relatado.

No fue hasta lunes por la tarde, cuando se intensificó la búsqueda de la pareja del Maresme desaparecida desde la semana pasada en torno al pantano de Susqueda, que pensaron que se podía tratar de su kayak. "Leímos qué es lo que iban a hacer allí, hablamos con un amigo nuestro que es Mosso d'Esquadra y nos dijo que llamáramos al 112", ha explicado. 

En el otro extremo del pantano

Aparte de las piedras y del hecho de que estaba pinchado, Heller expone que no vieron ningún otro detalle sospechoso. Este jueves, se ha desplazado hasta Susqueda "por si podemos echar una mano explicando dónde lo encontramos y dónde dejamos las piedras", ha expuesto.

El embarcadero se encuentra en el otro extremo de donde apareció el vehículo en el cual viajaba la pareja, un Opel Zafira de color azul. El miércoles, el conseller de Interior confirmó que el coche no cayó por accidente en el agua, sino que alguien lo empujó. El testimonio de los jóvenes apuntaría, también, que se podría haber intentado hacer desaparecer el kayak en el fondo del agua.

Todas las hipótesis están abiertas

El sargento de los Mossos d'Esquadra del ABP de Santa Coloma de Farners, Enric Padró, asegura que "no está confirmado" que hubiera piedras dentro del kayak. "Sí que se encontró en forma de uve, pero que hubiera piedras no está confirmado", ha explicado. Padró ha indicado que tanto el kayak como el coche son los dos indicios más importantes que siguen para intentar descubrir qué pasó y seguir el rastro de la pareja.

"De momento, se está analizando de forma técnica el kayak para intentar averiguar el origen del hundimiento", ha añadido el sargento, que tampoco confirma si estaba pinchado o deshinchado o si se sospecha que lo intentaron enviar en el fondo del pantano de forma intencionada. "Todas las hipótesis están abiertas", ha reiterado.

Este jueves continúa el dispositivo de búsqueda por tierra, agua y aire. A las unidades subacuáticas de Mossos d'Esquadra y Bomberos se han añadido también los GEAS de la Guardia Civil, tanto de Girona como de Barcelona. El jefe de guardia de la región de emergencias de Girona, Jordi Martín, ha explicado que cuentan también con un perro adiestrado para detectar personas perdidas en entornos acuáticos. "Es un plus en el dispositivo que nos puede permitir tener más indicios por averiguar dónde pueden estar estas dos personas que estamos buscando", ha concluido.