El Departament d'Educació ha abierto un expediente al Centre d’Educació Especial El Ventijol de Blanes (Selva) a raíz de unas denuncias por presuntos maltratos a alumnos con trastorno del espectro autista. Las quejas, según ha adelantado La Vanguardia y ha confirmado la Agència Catalana de Notícies (ACN), apuntan a posibles agresiones verbales y físicas, como torceduras de dedos, tirones de oreja o bofetadas, por parte de algunos profesionales del centro. Fuentes del Departament han explicado que la inspección inicial recogió testimonios contradictorios y que, de momento, no se han podido acreditar las conductas denunciadas. Sin embargo, se han identificado áreas de mejora en la gestión interna de la escuela y se han propuesto diversas medidas correctoras.
El Ayuntamiento de Blanes ha expresado su apoyo a la labor del centro y ha asegurado que no tenía constancia previa de ninguna denuncia. El alcalde, Jordi Hernández, ha explicado que ha mantenido conversaciones tanto con la dirección de la escuela como con la Associació de Famílies d’Alumnes (AFA), y que ambas partes se muestran “tranquilas”. “Somos muy conscientes del valor y el buen trabajo que hace la escuela Ventijol y, de hecho, no hace mucho se aprobó una moción para pedir mejoras en las infraestructuras”, ha resaltado Hernández en una comparecencia en su despacho del Ayuntamiento, recordando que recientemente el Pleno municipal aprobó una moción para pedir mejoras en las instalaciones del centro. El alcalde también ha insistido en que hay que respetar el proceso de investigación abierto por parte de Educació, que ha asignado un inspector adicional para seguir el caso: “Se tiene que saber lo que ha pasado y se tiene que aclarar todo”, ha remarcado.
“Serveis Terriotorials me han dicho que es de hace un año y sé que el Departament d'Educació está haciendo las investigaciones pertinentes”, señala Hernández que remarca “la tranquilidad” del centro y de las familias que “confían en sus docentes”. La ACN se ha puesto en contacto con la escuela, pero el centro ha declinado hacer declaraciones y se han remitido a las explicaciones que ha dado el Departament d'Educació. La Oficina Antifraude de Catalunya ha confirmado que dos de los denunciantes han sido reconocidos con el estatus de alertadores.
