Después del estallido de la polémica a raíz de la noticia que una paciente psiquiátrica se suicidó después de más de 48 horas esperando una cama, el Hospital de Terrassa se ha pronunciado finalmente y ha asegurado en un comunicado que el personal sanitario actuó "con profesionalidad". El centro ha afirmado en un comunicado difundido este viernes que en el momento de los hechos, el pasado 22 de agosto, se dio el seguimiento clínico según las actuaciones establecidas. Además, señala también que durante los dos días que la paciente estuvo al servicio de Urgències fue atendida por el equipo del área de Medicina y el equipo de Psiquiatria coordinadamente.
Asimismo, el hospital ha explicado en el comunicado que, a raíz del suicidio de la mujer, el Departament de Qualitat y Seguretat del Pacient del Consorci Sanitari de Terrassa ha iniciado un proceso de análisis de los hechos, paralelamente a la investigación de la Conselleria de Salud. El texto del centro hospitalario concluye con el lamento por la muerte de la paciente y la expresión del pésame a los familiares, al mismo tiempo que "respetan su luto y privacidad". Por su parte, el Ajuntament de Terrassa ha pedido al Govern que lleve a cabo una "investigación transparente" que sirva para aclarar los hechos. El consistorio vallesano también ha denunciado que la tragedia pone de manifiesto la importancia de seguir reforzando los recursos destinados a la salud mental y a la psiquiatría, tanto en personal como en medios materiales.
En este sentido, el presidente del comité de empresa del Consorci Sanitari de Terrassa, Xavier Lleonart, explicaba en declaraciones a RAC1 después de conocerse la trágica noticia que en el centro no dan abasto y que el servicio de urgencias "está en el peor momento". Lleonart denunciaba que la situación es insostenible y que ya hace meses que se registran episodios límite en el centro. Según explicó, hay pacientes psiquiátricos que han tenido que esperar hasta cinco semanas en unas urgencias generales antes de poder ser ingresados, hecho que supone pasar más de un mes en un espacio pensado para atenciones inmediatas y no para estancias prolongadas. El presidente del comité también recordó que en julio los médicos adjuntos llegaron a enviar una carta a la dirección del hospital advirtiendo que no podían hacerse responsables de lo que pudiera pasar, ya que se habían superado todos los límites de seguridad. A pesar de esta alerta, lamentaba, "no se hizo nada", y la situación derivó en un colapso que atribuye a un "problema crónico" arrastrado desde hace años y que, finalmente, estalló de la peor manera posible.