La compañía de telecomunicaciones Orange se ha adjudicado un contrato de 9,8 millones de euros con el Departament d'Educació de la Generalitat, para proporcionar internet a los alumnos más desfavorecidos y así reducir la brecha digital. El objetivo del acuerdo es garantizar la formación en línea por el impacto del Covid-19.

La Generalitat licitó el agosto pasado un concurso para proporcionar conectividad y garantizar la educación además de 50.000 estudiantes de Catalunya, una adjudicación que se ha llevado Orange, según ha informado la compañía en un comunicado. De esta manera, los alumnos con menos recursos dispondrán de conexión a internet a través de la red móvil de Orange, que proporcionará la anchura superior de lado para conectarse a las aplicaciones docentes.

El proyecto de aceleración de la transformación digital de los centros es una iniciativa que tiene como objetivo corregir la desigualdad educativa en el marco del Pla d'Educació Digital de Catalunya 2020-2023.

La compañía ha asegurado que garantizará la seguridad de las conexiones con 'Orange Security Site' y, además, permitirá al Departament d'Educació obtener un informe detallado de cada centro educativo. "Este caso es especialmente importante para nosotros, ya que va dirigido a familias desfavorecidas, un reto en el cual queremos dar una respuesta eficaz," ha destacado al director de Administraciones Públicas de Orange, Íñigo Polo.

El Ayuntamiento de Barcelona también se apoya a los alumnos más vulnerables

Por otra parte, l'Ajuntament de Barcelona, mediante el Consorcio de Educación, ha creado un banco de préstamo de tabletas con internet para el alumnado vulnerable durante el confinamiento. El consistorio ha invertido 500.000 euros de Fondo Covid en la compra de 2.000 dispositivos, que se suman a los 300 que quedaron disponibles el curso pasado después de que se distribuyeran 2.700 tabletas entre todos los alumnos en situación de vulnerabilidad social que cursaban sexto de primaria o primero de ESO.

El Consorcio, pues, gestiona un banco con más de 2.300 tabletas disponibles para el alumnado que esté confinado por el Covid-19, tanto los que han dado positivo como los que se han visto obligados a hacer cuarentena para ser contacto en un grupo estable.

Tablet Unsplash

Según el Ajuntament, los destinatarios de este servicio son los alumnos que se encuentran en una situación de vulnerabilidad acreditada y que están cursando estudios obligatorios y postobligatorios en centros públicos y concertados de la ciudad. "Se quiere asegurar la equidad de todo el alumnado ante situaciones de confinamiento, garantizar la igualdad de oportunidades educativas y hacer frente a la brecha digital", asegura el consistorio.

Desde principios de octubre han accedido a este servicio de préstamo de tabletas 610 alumnos en enseñanza obligatoria de 91 centros educativos, y se han distribuido 1.464 dispositivos entre alumnos de postobligatorio. Cuando el Consorci de Educació tiene conocimiento del confinamiento de un grupo, se pone en contacto con el centro para saber si hay alumnos susceptibles de necesitar una tableta para seguir las clases desde casa.

El Consorcio cede los dispositivos en el centro, que es lo que los entrega a los alumnos hasta al fin del confinamiento. Una vez superada la cuarentena, los tienen que devolver. Todos los dispositivos son desinfectados y reiniciado a cada devolución antes del nuevo préstamo.

Fotografía principal: Una familia en situación vulnerable estudiante en casa durante la crisis del Coronavirus / Sergi Alcàzar