La nave Insight de la NASA, que dejó de funcionar hace tres años mientras recopilaba datos en Marte, ha revelado ahora la existencia de un núcleo interno sólido, en el interior del planeta rojo, con un radio de unos 613 kilómetros. Se trata de la respuesta a una de las mayores incógnitas sobre el planeta y la cual, según los investigadores chinos y estadounidenses que han liderado el estudio, servirá para entender mejor cómo se formó Marte y evolucionó en el tiempo y también para responder al gran enigma de si el planeta rojo podría haber sido un lugar donde se hubiera podido desarrollar alguna forma de vida no terrícola.

El Insight, la nave que escuchó el corazón de Marte durante cuatro años

El equipo encabezado por la Universidad de Ciencias y Tecnología de China ha utilizado datos del módulo de aterrizaje Insight, que desde el 2018 hasta el 2022 recopiló datos sobre las capas interiores y, en especial, la actividad sísmica marciana, antes que el polvo levantado por las frecuentes tormentas de arena inutilizaran sus paneles solares. Tres años después, los datos recopilados sobre la estructura interna de Marte, han sido publicadas en la prestigiosa revista Nature. El estudio demuestra que las ondas sísmicas emitidas por Insight llegaron al sismómetro de la misma nave entre 50 y 200 segundos antes de lo que se podría esperar si el núcleo fuera puramente líquido.

Para conseguir eso, los investigadores se fijaron en las ondas sísmicas PKiKP del Insight, que reflejan lo que se produce al límite entre el núcleo externo, que es líquido, y el núcleo interno, que es sólido. Se trata, de una señal inequívoca de la existencia de un núcleo sólido, como ya se había demostrado anteriormente en la Tierra y en la Luna.

En los planetas rocosos, la presencia de un núcleo interno sólido tiene implicaciones importantes en la composición y la evolución térmica del núcleo, así como en la historia magnética del planeta. De esta manera, los investigadores señalan que el estudio, "proporciona un punto de referencia para comprender el estado térmico y químico de Marte". Además, la relación entre la formación del núcleo interno y la evolución del campo magnético marciano podría proporcionar información sobre la generación de dinamos a los cuerpos planetarios.

Los orígenes violentos del interior rocoso de Marte

Los datos de la misión Insight también han servido para otros estudios científicos, el más reciente publicado hace una semana en Science, en el que se indica que Marte no es como siempre lo han mostrado las ilustraciones de los libros de texto, con capas -corteza, manto y núcleo- lisas y estratificadas, sino que su interior es una amalgama irregular de rocas que dan testimonio de su origen violento. El manto del planeta contiene fragmentos antiguos de hasta cuatro kilómetros de anchura que se remontan al momento de su formación violenta y que se han preservado como fósiles geológicos.