El sindicalismo alternativo se ha manifestado esta tarde en Barcelona, en una marcha del Primero de Mayo convocada por la Mesa Sindical de Catalunya, que ha reunido a centenares de personas para exigir que se derogue la reforma laboral, la ley mordaza y la de extranjería. También han reclamado reducir la edad de jubilación y la duración de la jornada laboral. La protesta, que ha contado con representantes de la CGT, Intersindical Alternativa de Catalunya (IAC), CNT, COS, Solidaridad Obrera y Cobas y de partidos políticos como la CUP, ha congregado a unas 1.500 personas -según cifras de la Guardia Urbana-, 7.000, según los organizadores. Encabezada por el lema '1 de mayo ofensiva de clase', la manifestación ha recorrido varias calles de Barcelona hasta llegar a la sede de Foment del Treball. Al final de la marcha, un grupo reducido de manifestantes han roto cristales de algunas tiendas, principalmente de multinacionales, del centro de la capital catalana.
Destrozos de un grupo reducido
Cuando ha acabado la marcha, un grupo de personas han roto los cristales de diferentes establecimientos del centro, como los de la tienda de Zara de la esquina de plaza de Catalunya con Bergara, los de un establecimiento de Primark en la cabecera de las Ramblas, y también de una oficina del Banco Santander y de una tienda de intercambio de divisas. Aparte, han hecho pintadas en un edificio de la Universidad de Barcelona y han destrozado una puerta de cristal de la Oficina de Turismo de la Generalitat, situada en el Palau Moja, según recoge la ACN.
El manifiesto de los sindicatos alternativos
La Mesa Sindical ha convocado esta manifestación presentándose como una "alternativa" a los sindicatos mayoritarios, CCOO y UGT, que se han concentrado esta mañana en Via Laietana. En el manifiesto, las seis organizaciones que han participado en la protesta de esta tarde han tildado al Gobierno de "mentiroso" por no derogar la ley mordaza o por no retirar las partes "más lesivas" de la reforma laboral "tal como prometió". Según la Mesa Sindical, eso es consecuencia de que el ejecutivo de Pedro Sánchez está "arrodillado a los poderes económicos". Asimismo, han denunciado "la precarización de los servicios públicos, la privatización, el incremento de presupuesto militar, la explotación de los migrantes" y han exigido mejoras laborales, solidarizándose con la lucha contra la reforma de las pensiones del gobierno francés.
El portavoz de la Intersindical Alternativa de Catalunya, David Caño, ha asegurado que "o hay una mejora de las condiciones materiales de vida o habrá conflicto" porque, según ha expuesto, "ya no se puede aguantar más". "Venimos de años de recortes, de retrocesos y cada vez con condiciones de vida más precarias. Es más necesario que nunca retomar las calles", ha añadido la portavoz del sindicato COS, Cati Morros. Por su parte, la diputada de la CUP Eulàlia Reguant, que también ha participado en esta manifestación alternativa, ha afirmado que "hay que subir los salarios, incrementar el SMI, reducir jornadas, nacionalizar servicios estratégicos y políticas claras de vivienda pública".