Vaqueros diseñados y fabricados dentro de un “entorno responsable social, económico y medioambiental”. Esta es la premisa bajo la que, en 2020, Beatriz Rivera creó Bluyins, una marca de jeans totalmente comprometida con una producción alejada de la explotación de los trabajadores y del medioambiente.
Cada vez son más las firmas y clientes que apuestan por una moda sostenible, aquella en la que ningún trabajador es explotado y cuya ropa se fabrica con materiales ecológicos y locales para minimizar el impacto medioambiental. Se trata de una demanda creciente tanto por parte de los clientes como de los propios trabajadores de las empresas, que no quieren convertirse en cómplices de procesos totalmente opuestos a la ética.
Por eso, las nuevas marcas llegan dispuestas a ser el motor de un cambio muy necesario y demandado por una sociedad cada vez más concienciada, y Bluyins es el perfecto ejemplo de aquellas firmas que emergen en la industria con un compromiso total con el planeta y con la producción de la ropa.
La prenda estrella: los vaqueros
Su fundadora, Beatriz, era una de esas personas que echaban en falta una apuesta realmente sostenible en la industria de la moda. De su inquietud nació su marca, con un producto estrella: los tejanos, una prenda difícil de encontrar en la talla y medidas ideales para cada cuerpo. ¿Por qué jeans? “El vaquero es la prenda más contaminante por las cantidades inmensas de agua y químicos que se usan y por el proceso manual de producción, además de las enfermedades respiratorias y traumatológicas que genera a los trabajadores”, explica la creadora.
Así, su objetivo es ofrecer el tejano sostenible perfecto para cualquier mujer, en cualquier talla y en tres medidas diferentes, que ayude a cada mujer a “sentirse especial y segura”. Todo ello, además, made in Spain, pero sin olvidar la importancia del diseño, porque “más que una marca sostenible, el sector demandaba una marca sostenible con diseño”.
La modelo Marta Lamamié De Clairac vistiendo una prenda de Bluyins / Lea Farren
Alquiler y reparación de ropa
Otro de los puntos fuertes de Bluyins se encuentra en su modelo de negocio. Con el fin de ofrecer un servicio más completo y apostar por la moda circular, sus tejanos están disponibles no solo para comprar, sino también para alquilar. ¿Necesitas unos pantalones concretos para un evento u ocasión especial? Puedes alquilarlos durante unos días por un precio mucho más reducido que el de compra y, una vez terminado el plazo, decidir si comprarlos o devolverlos. “Poco a poco, el consumidor va adaptándose a esta nueva filosofía. En nuestro caso, los clientes sobre todo utilizan el alquiler para probarse algo, testar el producto y ver si realmente cumple con los valores de la marca”, asegura Beatriz sobre la opción que han lanzado de la mano de Newe como desarrolladores tecnológicos.
Por otro lado, la empresa también se dedica a reparar prendas desgastadas, o bien darles un giro de estilo y modernizarlas. Desde su taller, y junto a Planetadots, proyecto Slow fashion que impulsa la moda sostenible, ofrecen la posibilidad de “repararlos para que puedas seguir usándolos, o de customizarlos con restos de otros tejidos y hacer de ellos una prenda única”.
La modelo Sara Vela vistiendo una prenda de Bluyins / Lea Farren
Moda asequible
El compromiso de Bluyins va más allá del uso de materiales totalmente ecológicos como el algodón orgánico libre de pesticidas. Durante el proceso de producción de las prendas, todas ellas confeccionadas en Madrid, se reducen los litros de agua utilizados en hasta en un 80%, y el consumo de energía se reduce a la mitad.
En cuanto a la fabricación y producción de las prendas destacan la innovación y reciclaje, que se combinan con el uso de las tecnologías láser más avanzadas para crear jeans únicos, cómodos, versátiles y atemporales.
La modelo Marta Lamamié De Clairac vistiendo una prenda de Bluyins / Lea Farren
Ahora, y con una nueva colección que llegará a mediados de octubre, Bluyins se ha propuesto ir más allá de los vaqueros y explorar el mundo denim en todo tipo de prendas. Gracias a su filosofía slow, la misma de los proveedores con los que trabajan y la transparencia total en la cadena de producción, la firma puede ofrecer productos sostenibles a la vez que asequibles: “la sostenibilidad no es solo ambiental, sino también económica y social”, remarca su creadora.
¿El resultado? Tejanos con expresión propia, sostenibles y de alta calidad que nos hacen sentir únicas y que nos durarán muchos años. Porque lo sostenible no tiene por qué ser inaccesible.
Imagen principal: las modelos Sara Vela y Eva Diallo vistiendo una prenda de Bluyins / Lea Farren