La juez de Primera Instancia e Instrucción número 6 de Ceuta ha decretado el sobreseimiento libre y el archivo de la causa abierta por la muerte de 15 inmigrantes en la frontera del Tarajal, en la que 16 guardias civiles estuvieron imputados y posteriormente fueron exculpados. Los hechos ocurrieron el 6 de febrero de 2014, cuando la guardia civil disparó pelotas de goma y gases lacrimógenos contra un grupo de inmigrantes que querían entrar en Ceuta nadando por la playa, junto al punto fronterizo de Tarajal. 15 inmigrantes murieron y los 23 que lograron llegar a territorio español fueron devueltos a Marruecos "en caliente".

La decisión judicial

Según el auto judicial, al que ha tenido acceso Efe, fechado el día 26 de enero, "no aparece debidamente justificada la perpetración de los diferentes delitos que han dado motivo a la formación de la causa", por lo que decreta el sobreseimiento libre de las actuaciones una vez "han sido cumplimentadas" las diligencias de instrucción. La juez recuerda que el 15 de octubre de 2015 se acordó por primera vez el sobreseimiento provisional de la causa abierta por delitos de homicidio y lesiones imprudentes. La juez señala que, "desde la reapertura de la causa, fuera de las diligencias de prueba anteriores, se reducen a dos las pruebas nuevas cuya práctica ha sido solicitada por las partes personadas".

Problemas con el testimonio de los ilegales retornados

Estas pruebas son la declaración de un testigo presencial "por ostentar la regencia de un quiosco en las inmediaciones del lugar de los hechos, de cuyo testimonio se deduce que no observó ningún comportamiento por parte de los agentes de la Guardia Civil reprochable desde el punto de vista penal", y la declaración de otros dos testigos sobre los que "no consta que hayan pasado por territorio español en fechas relativamente recientes o cercanas al 6 de febrero de 2014". El hecho que los inmigrantes testigos de las muertes fueran devueltos a Marruecos ha complicado notablemente la instrucción judicial.

Las contradicciones del gobierno español

En un primer momento, el delegado del Gobierno en Ceuta y el director de la Guardia Civil negaron que se hubieran lanzado gases lacrimógenos o pelotas de goma contra los inmigrantes que llegaban a nado. Posteriormente el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, reconoció en el Congreso que sí se habían producido esos lanzamientos, aunque "lejos" de donde estaban los inmigrantes. Meses más tarde el 6 de febrero de 2015, el juez de la Audiencia Nacional Fernando Andreu rechazó la competencia de ese tribunal para investigar la tragedia ocurrida en la playa de El Tarajal, y devolvió la causa a un juzgado de Ceuta.

Decididos a recurrir

Las ONG en defensa de los derechos humanos han decidido recurrir esta sentencia. Consideran acreditado que la Guardia Civil actuó de forma ilegal ante la llegada de inmigrantes, y alegan que incluso se ha demostrado con documentales como TarajalAlgunas entidades han criticado muy duramente que la juez rechace el testimonio de los supervivientes, alegando que como no tienen papeles, no pueden entrar en España para prestar declaración.