El juzgado de lo penal número 3 de Terrassa ha absuelto a la fotoperiodista Mireia Comas de un delito de atentado a la autoridad. Comas estaba acusada de haber agredido a una agente de los Mossos d'Esquadra durante un desahucio en Terrassa el octubre pasado, en un momento en que la fotógrafa había intentado salir del edificio y habría tenido el choque con la policía.

La defensa ha recibido la sentencia este mismo jueves, y se especifica que no queda probado que Comas agrediera al agente policial cuando intentaba salir, como relataba. A pesar de la satisfacción por la recepción de la resolución favorable a Comas, la defensa recuerda que la sentencia no es firme, motivo por el cual todavía se espera que se pueda recorrer. La misma Comas ha hecho un tuit celebrando la absolución y agradeciendo el apoyo.

Los hechos pasaron el 13 de octubre en la calle Àngel Guimerà, en el barrio de Can Palet de Terrassa, donde los Mossos d'Esquadra practicaban un desahucio. Comas estaba trabajando en un reportaje fotográfico sobre grupos migrantes en Terrassa, y al recibir el aviso se desplazó y accedió al inmueble, ocupado la noche antes, donde la dejaron estar para acompañar a la mujer que había en el interior.

No obstante, Comas apunta que el ambiente estaba cada vez más tenso e intentó salir, momento en que chocó con el agente de los Mossos que, según ella, la redujo y posteriormente detuvo. En este momento, el agente asegura que Comas la agredió, pero la defensa argumentaba que ni por peso ni altura es capaz de poder enfrentarse a una agente preparada físicamente, como era el caso.

La defensa ha recibido la sentencia con satisfacción. "Se especifica las contradicciones de los agentes, por la versión que dio Mireia corroborada por un testigo, y por la versión del forense, que apunta que las lesiones eran compatibles con la detención y no con los hipotéticos golpes que le hizo Mireia", señala el abogado de Comas, Marc Pérez, en declaraciones a la ACN. Ahora, sin embargo, quedan a la espera de saber si la acusación recurre la sentencia.

El caso contra la fotoperiodista despertó la solidaridad del sector, que llevó a cabo una manifestación el pasado mes de octubre en apoyo de la profesional y contra la actitud de algunos de los agentes de la policía catalana.