Aunque parece que lentamente los contagios de esta quinta ola de la covid se van estancando y la incidencia acumulada en Catalunya sigue una tendencia decreciente, los hospitales siguen bien llenos. En las últimas 24 horas, aparte de registrar 58 nuevas muertes, el número de nuevos hospitalizados se ha reducido en 2 pacientes, dejando un total de 2.237. En cambio, 25 nuevos pacientes críticos han ingresado en las UCI, donde ya hay 535 enfermos.

Ante este aumento de la presión asistencial, el sindicato Metges de Catalunya ha avisado este martes al departament de Salut que, en caso de que cancele las más que necesarias vacaciones de personal sanitario, recurrirá a instancias judiciales y hará frente a la medida "por todas las vías posibles". Desde la entidad consideran que una eventual cancelación será "un punto de inflexión" que rompería consensos entre la administración y los profesionales del sistema, según han explicado en un comunicado.

trasplante pulmon enefermo Covid Vall d'Hebron Foto Cedida Hospital Vall d'Hebron

Sanitarios trabajando el primer trasplante de pulmón de un enfermo de covid en el Vall d'Hebrón

En declaraciones en el diario El Punt Avui, su secretario general, Xavier Lleonart, ya advirtió que esta suspensión "no sería una línea roja, sino un punto final que hará saltar por los aires todas las costuras", criticando que se haya normalizado esta situación de emergencia y recordando que las bajas por vacaciones no se cubren con más profesionales en sustitución, sino haciendo doblar la jornada al personal que se queda. "Eso es medicina low cost en la máxima expresión y esta falta de recursos para ahorrar ahora es insuficiente para hacer frente a la quinta ola", aseguró en la entrevista.

Críticas a decisiones equivocadas

Además, hoy la organización ha denunciado que el Gobierno tomó decisiones "equivocadas y precipitadas" en la suavización de las restricciones contra la covid y les reprocha su "falta de planificación y preparación" ante la nueva variante delta, "mucho más contagiosa". Así, ha criticado que esta "irresponsabilidad" no se puede cargar en estos momentos "sobre las espaldas de los facultativos, que están agotados y con un estado anímico muy bajo".

En este sentido, la doctora Magda Campins, jefe del Servicio de Medicina Preventiva y Epidemiología del hospital Vall d'Hebron consideró hace unos días que las medidas eran las correctas en el momento en que se tomaron, a finales de junio y cuando la pandemia parecía controlada, pero que se tardó demasiado en rectificarlas, hecho que provocó la expansión de la quinta ola. Campins también apuntó entonces que esta llegaba en un contexto de vacaciones de los sanitarios después de muchos meses de trabajo. Unos días de descanso que, según ella, "se tienen que hacer pase lo que pase, no podemos decir a la gente que vuelva antes de tiempo".

Una "posibilidad real"

Por su parte, Salud mantiene que el personal sanitario tienen que poder hacer sus vacaciones a pesar de la presión asistencial, si bien el conseller Josep Maria Argimon no ha descartado del todo que pudiera haber una cancelación y ya ha reconocido que se trata de una "posibilidad real".

Por todo ello, el sindicato ha querido alertar de que si antes de la pandemia el porcentaje de facultativos en situación de incapacidad era inferior al 3%, ahora se sitúa cerca del 10%, por incidencia de contagios, covid persistente y bajas por estrés y ansiedad. Eso provoca que las vacaciones, aparte de ser un derecho fundamental, se convierten en una necesidad "física y mental" para el personal sanitario y plantear su anulación es una "crueldad y una injusticia", según ha alertado Médicos de Catalunya.

En la imagen principal, dos sanitarias trabajando en un hospital durante la pandemia / Efe