El verano es una de las épocas más propicias para celebrar con los amigos, salir y a veces pasarse un poco con la comida y la bebida. Hasta ahí todo bien, lo malo es el día siguiente, sobre todo cuando pasan los años.

Un día de resaca puede convertirse en un verdadero infierno para muchas personas. Al fin y al cabo es una reacción de nuestro cuerpo que se manifiesta generalmente con fatiga, dolor de cabeza o incluso náuseas. A veces, la presión arterial aumenta, el corazón late más rápido de lo normal y las glándulas sudoríparas se producen en exceso.

También se puede producir una hipersensibilidad sensorial frente a los sonidos o las luces, aunque cada persona la sufre a su manera. Y tampoco hace falta haber bebido como un cosaco. Varios estudios sugieren que los bebedores moderados son más vulnerables a las resacas que los que beben mucho. La Universidad de Harvard ha publicado una guía para sobreponerse de la mejor manera posible a los síntomas de estos pequeños excesos y estas principales recomendaciones para combatirlos.

Beber líquidos

El alcohol promueve la micción porque inhibe la liberación de vasopresina, una hormona que disminuye el volumen de orina que producen los riñones. Por este motivo, puede favorecer una deshidratación que aumenta si al día siguiente, durante los síntomas, se presenta también una diarrea.

Ingerir carbohidratos

Los excesos hacen disminuir los niveles de azúcar en la sangre, y se cree que los síntomas de fatiga y los dolores de cabeza se deben a que el cerebro no puede emplear el azúcar como combustible. Por eso es aconsejable tomar alimentos ricos en hidratos de carbono.

Tomar algún analgésico

Cuando no hay más remedio, es aconsejable tomar algún analgésico del tipo paracetamol o aspirina. Pero hay que tener cuidado con los antiinflamatorios no esteroides como el ibuprofeno, porque pueden hacer daño a un estómago ya irritado por el alcohol y otros alimentos fuertes.

Beber café o té

La cafeína en sí no tiene ningún efecto especial contra la resaca, pero puede ayudar como estimulante y mejorar síntomas como el aturdimiento. Sin embargo, hay que tener en cuenta que el café es un diurético, por lo que puede exacerbar la deshidratación y no se debe tomar en exceso.

La vitamina B6

Hace ya 30 años que se publicó un estudio en el que se demostró que las personas tenían menos síntomas de resaca si tomaban un total de 1.200 miligramos de vitamina B6 antes, durante y justo después de cometer estos excesos típicos de una noche de verano.