Las personas a las que les gustan las especias están de enhorabuena porque no solo se benefician del sabor de los alimentos con los que las combinan, sino que la ciencia avala la pertinencia de consumir comida picante.  Está demostrado que especias como la canela, la cúrcuma, el jengibre, el chile y el comino se utilizan con frecuencia y son saludables.

Por eso, a continuación vamos a ver cinco razones por las que deberías considerar añadir un poco de picante en tu día a día.

Tiene beneficios para la longevidad

Comer alimentos picantes frecuentemente o incluso solo una vez al día, redujo las tasas de mortalidad en un 14 por ciento, según un gran estudio realizado por Harvard y el Centro Nacional para el Control y la Prevención de Enfermedades de China.

Acelera el metabolismo

Los datos de numerosos estudios indican que ciertas especias, como el comino, la canela, la cúrcuma y los chiles, pueden aumentar la tasa de reposo metabólico y ralentizar el apetito. Otro estudio también encontró que la cúrcuma suprimió el crecimiento de tejido graso en ratones.

EspeciasLas especias combaten la inflamación

La curcumina, un compuesto de la cúrcuma, puede reducir la inflamación en el cuerpo. En la medicina ayurvédica, las propiedades antiinflamatorias del jengibre y el ajo se han utilizado durante siglos para tratar una variedad de afecciones, como artritis, trastornos autoinmunes e incluso dolores de cabeza y náuseas.

Las especias pueden incluso combatir las células cancerosas

Se ha demostrado que la capsaicina, un componente activo de los chiles, ralentiza y destruye las células cancerosas. Un estudio de la universidad de UCLA encontró que la capsaicina inhibía el crecimiento de las células cancerosas de la próstata en los ratones y dejaba ilesas las células sanas.

Las especias ayudan a matar las bacterias

Se ha demostrado que el comino y la cúrcuma tienen poderosas propiedades antioxidantes y antimicrobianas. Esto significa que pueden usarse contra bacterias dañinas en el cuerpo.

Cuidado

La capsaicina, la sustancia picante que se encuentra en los chiles, puede provocar síntomas intensos a corto plazo, como dolor de estómago, diarrea y vómitos en quienes consumen grandes cantidades. Esto ocurre debido a la sobreestimulación del sistema nervioso. La buena noticia es que no se produce ningún daño permanente en el revestimiento intestinal.

Aunque anteriormente se creía que los alimentos picantes podían provocar úlceras, la evidencia actual ahora confirma que la capsaicina brinda protección contra el patógeno de la úlcera, H. pylori. La capsaicina también actúa como un analgésico cuando se aplica tópicamente o se ingiere.