Cuanto más se estudia el intestino, más evidente resulta el papel trascendental que juega en la salud en general de las personas. Desde el sistema inmunológico hasta la ansiedad, esta parte del organismo tiene la clave de muchos de las enfermedades que desarrollamos a lo largo de la vida.

Ahora un nuevo estudio publicado en Science Translational Medicine ha demostrado cómo la microbiota intestinal de los ratones adultos puede promover el crecimiento neuronal en los ratones más jóvenes. Dicho así, no parece tan importante, pero lo que los científicos han averiguado es que las bacterias intestinales pueden impulsar el proceso de antienvejecimiento.

Laboratorio

La investigación fue llevada a cabo en la Universidad Tecnológica de Nanyang y los expertos realizaron un experimento en el que transfirieron la microbiota intestinal de los ratones más viejos, al intestino de ratones más jóvenes con una comunidad bacteriana intestinal menos desarrollada. Esto dio como resultado una neurogénesis mejorada (crecimiento neuronal) en el cerebro y un envejecimiento alterado, lo que sugiere que la relación entre las bacterias y su huésped puede tener beneficios significativos para la salud. 

Teniendo en cuenta la relación que existe entre la microbiota intestinal, la nutrición, el metabolismo y el comportamiento, la comunidad médica espera que este estudio sea un paso más que pueda conducir al desarrollo de un tratamiento basado en alimentos para ayudar a retrasar el proceso de envejecimiento.

El estudio

El microbioma intestinal cambia a medida que una persona envejece, y para investigar cómo evoluciona, el equipo de investigación trasplantó el microbioma intestinal de ratones de 24 meses de edad a ratones jóvenes sin apenas bacterias de 6 semanas de edad. Después de 8 semanas, observaron un mayor crecimiento intestinal y una mayor neurogénesis en el cerebro de los ratones.

Para controlar el experimento, el equipo transfirió el microbioma intestinal de ratones jóvenes a ratones libres de bacterias de la misma edad. Los investigadores no observaron los mismos efectos que observaron en los ratones que recibieron el microbioma intestinal de ratones más viejos. 

El equipo también realizó análisis moleculares en los roedores y descubrió que habían aumentado los niveles de butirato. El butirato es un ácido graso de cadena corta que producen los microbios intestinales, que es beneficioso para la salud y puede proteger contra enfermedades como la enfermedad inflamatoria intestinal, el cáncer colorrectal, la obesidad y la diabetes. 

El enriquecimiento de ciertos microbios intestinales y el aumento de la fermentación bacteriana de las fibras dietéticas en el colon condujeron a estos niveles aumentados de butirato. A su vez, el aumento de los niveles de butirato estimuló la producción de la hormona pro-longevidad FGF21. Esta hormona juega un papel importante en la regulación del metabolismo.

Anciano

El envejecimiento normal del tejido intestinal reduce la viabilidad de las células intestinales, lo que a su vez conduce a un mayor daño celular. Al trasplantar el microbioma de ratones más viejos a ratones más jóvenes los investigadores observaron cómo se producía un aumento en la longitud y el ancho de las vellosidades intestinales, así como un colon y un intestino delgado más largo.

Todos estos hallazgos, según los científicos, sientan las bases para el desarrollo de tratamientos relacionados con el microbioma para promover una longevidad saludable y evitar enfermedades asociadas con el envejecimiento, como los trastornos neurogenerativos.