Otro caso, cuyas causas todavía están por determinar, cuestiona los efectos secundarios de la vacuna de AstraZeneca. Una mujer de 38 años, trabajadora social, murió el lunes en Toulouse, Francia, de una trombosis. La muerte le llegó catorce días después de la inyección de la primera dosis de este fármaco. No sufría ningún problema de salud en particular pero las complicaciones le aparecieron poco después de la inoculación. Primero fue ingresada en el Hospital Toulouse Purpan, entró en coma y, poco después, sufrió un coágulo de sangre.

Dos mujeres francesas muertas

Este caso es el segundo en Francia. En Nantes, una estudiante de 24 años vacunada con AstraZeneca también murió el 8 de marzo. La familia dio la alerta por desaparición y la encontraron muerta en el interior de su piso, donde vivía sola. Tan sólo le había explicado por teléfono a su hermano que sufría "un fuerte dolor de barriga". La Fiscalía abrió una investigación y los resultados de la autopsia también determinaron un "sangrado interno por trombosis". La Agencia Nacional de Seguridad del Medicamento (ANSM) de Francia está analizándolo, aunque admite que hay un "riesgo muy raro" de trombosis después de la inyección: "La relación entre el beneficio y el riesgo de la vacuna sigue siendo positiva, ningún elemento indica de momento que la vacunación haya provocado estos trastornos".

A pesar de todo, la ANSM es una de los más reticentes a nivel europeo. Suspendió durante unas semanas su uso pero lo ha reemprendido tan sólo para personas de 55 años o mayores. Precisamente, el primer ministro francés, Jean Castex, que tiene 55 años, se vacunó públicamente el pasado 19 de marzo para dar un mensaje de confianza a la población.

La agencia francesa recuerda la "importancia de que los sanitarios que vacunen adviertan a los destinatarios que busquen atención médica inmediata para encontrar síntomas de tromboembolismo y, sobre todo, signos de trombocitopenia y coágulos de sangre cerebral ,como contusiones fáciles o hemorragias y cefalea persistente o severa, sobre todo más tarde de los tres días posteriores a la vacunación".

Alemania también marca la edad

En paralelo, Alemania fija límites a AstraZeneca. Ayer, Berlín la suspendió para pacientes menores de 60 años. Aunque este medicamento está apoyado por la autoridad sanitaria europea, la EMA, y la Organización Mundial de la Salud, la OMS, la decisión se tomó "por precaución", en declaraciones de Dilek Kalayci, jefe de Salud del Senado de Berlín. Kalayci, igual que en Francia, también habla "de efectos raros y graves". Munich se ha unido a la decisión. Ayer mismo, las clínicas públicas de Berlín la suspendieron para mujeres menores de 55 años, según informa Tagesspiegel. Más allá de Europa, Canadá ha tomado la misma decisión.