Al mundo de la ciencia le queda todavía un largo recorrido para comprender el cerebro y su funcionamiento. Y más aún qué ocurre en la mente de los seres humanos mientras dormimos. Por eso, cada descubrimiento es un avance importante para dar pasos adelante sobre las capacidades del órgano más importante y desconocido de las personas, el cerebro.

Cuando soñamos, la mente realiza una compleja mezcla de episodios de realidad con pasajes producto de su imaginación e información de la memoria, que todo junto hace que si recordamos algo al despertar, en muchas ocasiones no tenga sentido alguno.

Despertando

Los especialistas consideran que tiene que ver con la reorganización de la memoria mientras se duerme y son muchos los que afirman que estudiar o recibir información antes de dormir es una buena manera para consolidar esos conocimientos.

Recientemente, un equipo de investigadores de la Universidad de Northwestern, en los Estados Unidos, se pusieron manos a la obra para ver si era posible influir en el sueño con el fin de que la persona que estuviera durmiendo pudiera resolver problemas antes de acostarse, dado que decían saber que las personas ensayamos o consolidamos los recuerdos durante el sueño, reorganizándolos o haciéndolos más fuertes. Los hallazgos del trabajo se han publicado en la revista Psychological Science.

Así, los científicos se preguntaron si podría haber una estrategia de resolución de problemas similar a la reorganización de la memoria durante el sueño. Para comprobar si lo que creían que podía ser cierto se confirmaba, los investigadores necesitaban una forma de dirigir los cerebros de los que dormían hacia problemas específicos pero sin despertarlos de su sueño.

Buscaron saber si 57 participantes voluntarios podían resolver problemas mientras dormían. Para ello, presentaron a los participantes una variedad de acertijos antes de acostarse. Cada uno de ellos iba acompañado de un sonido distinto. Después de someterse a esta situación, los voluntarios se iban a dormir después de que algunos de los problemas se quedaran sin resolver.

Mientras cada participante dormía, los científicos reprodujeron los sonidos de la mitad de las situaciones sin resolver a un nivel lo suficientemente alto como que se pudieran oír pero sin causarles una interrupción del sueño.

Rubik

Por la mañana, después de haber dormido, los voluntarios pudieron volver a trabajar con los problemas y fueron capaces de resolver casi el 32% de aquellos de los que recibieron sonidos durante el sueño; una mejora del 55% sobre el 20,5% de los ejercicios no resueltos que no habían recibido ningún estímulo auditivo durante el descanso nocturno.

Es la primera vez que un estudio demuestra que el sueño puede manipularse para conseguir la resolución de problemas que no se consiguen descifrar mientras se está despierto. Según los responsables del estudio, el trabajo evidencia que el procesamiento del cerebro durante el sueño es útil para la cognición durante el día.