El coronavirus tiene una alta capacidad de transmisión, tal y como han destacado los epidemiólogos. Puede vivir en superficies como el cartón hasta 24 horas y hasta 3 días en el plástico y metales. Por eso es importante tener una buena higiene en el hogar. Y no se trata solo de una limpieza normal, la de retirar el polvo con un trapo o un plumero. En determinadas zonas la mejor opción es desinfectarlas de forma frecuente durante estos días, sobre todo aprovechando que algún miembro del hogar haya salido a la calle por trabajo o a la compra.

Existen diversas áreas del hogar a las que debemos prestar una mayor atención, especialmente baños y cocinas. En ellos podemos encontrar una serie de superficies susceptibles de albergar el virus: tiradores, frentes de los armarios y cajones, mangos y frentes de los electrodomésticos, grifos, lavabo, duchas, radiadores...

Limpiar coronavirus

Otros objetos y lugares de las casas que deberían recibir una buena limpieza son los pomos y picaportes de las puertas, los mandos de las televisiones y otros aparatos eléctricos, así como los de las consolas, los teclados y ratones de los ordenadores, los teléfonos móviles y fijos, interruptores de la luz y barandillas de escaleras.

Pero no nos podemos quedar ahí. En las habitaciones es importante lavar en profundidad las sábanas, fundas de almohadas, incluso las alfombras pequeñas. Otros textiles a los que deberíamos prestar atención son cortinas, fundas del sofá o las toallas de los baños.

En cuanto a los productos que se pueden utilizar, son aconsejables la lejía y el amoníaco diluidos en agua e incluso el alcohol. Se puede utilizar un paño humedecido sobre las superficies libres de objetos y teniendo especial cuidado en los recovecos y surcos que pudiera haber.

En el caso de que en el hogar haya una persona con coronavirus o con síntomas aún sin confirmar, el propio Ministerio de Sanidad ha propuesto una serie de consejos para tenerlos en cuenta. En estos casos es muy importante desinfectar al menos una vez al día las superficies, utilizando en estos casos mascarillas y guantes. Los platos y cubiertos se deben lavar en el lavavajillas, lo que ofrece un mayor poder de desinfección, y la ropa en la lavadora a una temperatura de más de 60 grados.

Limpiadores

Por último, destacar la necesidad de utilizar un cubo de basura en la habitación enfermo para depositar los residuos, entre ellos el material desechable utilizado por el propio enfermo. Están recomendados los cubos con pedal de apertura y tapa y las bolsas con cierre hermético que, a su vez, debe introducirse en una segunda bolsa para tirarla posteriormente junto al resto de residuos domésticos.