La medicina hiperbárica es una terapia farmacológica basada en la dispensación de una alta concentración de oxígeno a una presión superior a la atmosférica, en el interior de una cámara hiperbárica. De esta forma, el oxígeno se disuelve y transporta de forma más fácil en la sangre logrando una hiperoxigenación de las células del cuerpo. Precisamente, el Hospital Universitari General de Catalunya ha estrenado recientemente una nueva Unidad de Medicina Hiperbárica.

Pero, ¿qué utilidad tiene? La utilización de la medicina hiperbárica es muy amplia y abarca desde la oncología, en la que destacan sus beneficios en una mejor calidad de vida del paciente y tolerancia a los tratamientos oncológicos y en la recuperación de las lesiones producidas por éstos; a la neurología en la que su eficiencia está probada en pacientes de esclerosis múltiple, parálisis cerebral o accidente cerebrovascular, entre otros, o las heridas e infecciones acelerando la cicatrización y reduciendo el riesgo de amputación en el caso del pie diabético.

¿Cómo funciona?

El paciente ingresa a la cámara hiperbárica y respira concentraciones de oxígeno cercanas al 100% en un entorno presurizado, produciendo una Hiperoxia que desencadena una extensa cadena de beneficios fisiológicos. Esta hiperoxigenación en sangre y órganos desencadena importantes efectos beneficiosos para nuestro organismo, entre ellos la regeneración de tejidos y para lesiones musculares, óseas o de tendones, entre otros. La medicina hiperbárica está recomendada para mejorar el rendimiento físico en deportistas y para la recuperación de las lesiones y patologías osteomusculares, optimizando el entrenamiento y la resistencia.

Además, se aconseja su uso para la reducción de los síntomas generados por la fibromialgia y la fatiga crónica, lo que mejora la calidad de vida, ya que el aumento del oxígeno en la sangre tiene efectos antiinflamatorios, estimula la cicatrización y repara los tejidos, al aumentar la capacidad antioxidante.

Esto último es aplicable también a las heridas y cicatrices, ya que acelera la recuperación en caso de quemaduras, injertos, úlceras y vasculitis. Finalmente destacar que la cámara hiperbárica puede ser usada sin necesidad de sufrir una patología previa, como prevención, ya que su uso evita las consecuencias de las lesiones y el deterioro físico producido por los estados de falta de oxígeno.

Los beneficios del tratamiento con oxígeno hiperbárico

La Vasoconstricción, esto es, disminuye el edema logrando acción antiinflamatoria. Neovascularización Angiogénesis, que genera vasos sanguíneos acelerando la cicatrización, reparación y recuperación de tejidos. Estimulación fibroblástica, que incrementa la síntesis de colágeno para cicatrización y reparación de heridas y tejidos. Además, también disminuye el estrés oxidativo. Neurotransmisores, que actúa directamente sobre la secreción y su regulación. Estimulación de células madres, porque participan en la formación de nuevos vasos sanguíneos y de tejido. Y también incrementa la actividad inmunológica celular ya que estimula la acción bactericida de las células blancas de la sangre.

El Tratamiento de Oxigenación Hiperbárica (TOHB), la cantidad de sesiones, la periodicidad y la duración deben ser indicadas por un médico. La sesión es placentera. El paciente ingresa sin calzado, con ropa cómoda y los elementos que considere necesarios para relajarse (libro, tablet, música).

La Terapia de Oxigenación Hiperbárica (TOHB) surgió hace más de 200 años, aunque ha sido en las últimas décadas cuando se han comenzado a difundir muchas de sus aplicaciones y beneficios.