La artrosis es, sin duda, una de las patologías que más afectan a las personas con el paso de los años y de las que más inconvenientes puede causar en lo que a movilidad se refiere. A los 20 años, alrededor de un 4% de la población padece artrosis. A los 70, la cifra aumenta hasta el 80%. Los tratamientos son en su mayor parte paliativos, porque no existe un tratamiento que la elimine. Los médicos generalmente tratan los síntomas a través de medicamentos para el dolor, aumentando la actividad física, la pérdida de peso, dispositivos de apoyo como muletas y, si es necesario, cirugía. 

Ahora, un nuevo estudio llevado a cabo por un equipo de expertos del Instituto Salk de Estudios Biológicos de California, ha descubierto un nuevo tratamiento farmacológico que actúa en células aisladas de cartílago humano y que puede suponer una gran esperanza para todos aquellos que padecen la enfermedad.

Dolor rodilla

La investigación ha sido publicada en la revista Protein & Cell y se centra en la artrosis que generalmente se presenta en las manos, caderas o rodillas de una persona. La enfermedad provoca que el cartílago entre los huesos se rompa y los huesos cambien de forma, lo que produce dolor, rigidez e hinchazón.

El estudio

La capacidad del cuerpo para combatir la degeneración del daño por desgaste en las articulaciones disminuye con la edad lo que hizo pensar a los científicos la idea de desarrollar un tratamiento que fomentara las propiedades regenerativas de los jóvenes. Para ello decidieron combinar la administración de dos moléculas, llamadas alfa-KLOTHO y TGF beta receptor 2 que afectan a las moléculas que rodean las células del cartílago, ayudando a evitar que esta malla de soporte se degrade y a evitar que las células del cartílago se rompan favoreciendo que produzcan más células.

Mediante el uso de un virus inofensivo, los investigadores dieron a los ratones con osteoartritis las instrucciones de ADN para fabricar estos dos tipos de moléculas, mientras que otro grupo de roedores recibió placebo. Después de 6 semanas, los ratones que recibieron el placebo presentaron una artrosis más severa en las rodillas. De hecho, la enfermedad, en efecto, pasó de la osteoartritis de la etapa 2 a la etapa 4. En cambio, los ratones que recibieron las moléculas, experimentaron una mejora muy significativa. Tenían un cartílago más grueso y saludable y más proliferación de células.

Dedos artrosis

Analizando más exhaustivamente, los expertos pudieron comprobar que la combinación de medicamentos afectaba a los genes relacionados con la inflamación y las respuestas inmunitarias, brindándoles información para ayudarles a comprender con precisión cómo estaba funcionando el tratamiento.

Aunque las primeras pruebas se realizaron en ratones, también se testó el tratamiento en células de cartílago humano aisladas para ver si los resultados podrían ser replicables en personas. Y, efectivamente, los investigadores descubrieron que aumentaba la cantidad de moléculas y el cartílago había engrosado. Es decir, que se ha abierto el camino para lograr revertir el efecto de la artrosis en las personas.