La artritis es una condición de salud común que involucra inflamación crónica en las articulaciones. Causa dolor y daño a las articulaciones, huesos y otras partes del cuerpo, según el tipo. La osteoartritis, que no es inflamatoria, es la más común, aunque existen más de 100 tipos.

De hecho, hasta el 40% de los hombres y el 47% de las mujeres pueden ser diagnosticados con osteoartritis durante su vida. Asimismo, la artritis reumatoide y la artritis psoriásica son afecciones inflamatorias que se consideran enfermedades autoinmunes. La gota es otro tipo común de artritis inflamatoria.

Millones de personas en el mundo padecen artritis y por eso existen tantas investigaciones al respecto de la misma. Algunas de ellas han mostrado que las intervenciones dietéticas, como la eliminación de ciertos alimentos y bebidas, pueden reducir la gravedad de los síntomas en personas con artritis inflamatoria y osteoartritis, así como mejorar su calidad de vida en general. Por eso a continuación vamos a señalar cuáles conviene evitar para sufrir menos los rigores de la artritis.

Alimentos con gluten

El gluten es un grupo de proteínas del trigo, la cebada y el centeno. Algunos estudios lo relacionan con un aumento de la inflamación y sugieren que no consumir gluten puede aliviar los síntomas de la artritis. Es más, las personas con enfermedad celíaca tienen un mayor riesgo de desarrollar artritis reumatoide. Asimismo, quienes padecen enfermedades autoinmunes como la artritis reumatoide tienen una prevalencia significativamente mayor de padecer enfermedad celíaca que la población en general.

Cereales

Alimentos ultraprocesados

Los productos ultraprocesados ​​como la comida rápida, los cereales para el desayuno y los productos horneados suelen tener un alto contenido de cereales refinados, azúcar añadida, conservantes y otros ingredientes potencialmente inflamatorios, que pueden empeorar los síntomas de la artritis.

Las dietas occidentales, ricas en alimentos muy procesados,​​pueden aumentar el riesgo de padecer artritis reumatoide al contribuir a la inflamación y factores de riesgo como la obesidad.

Azúcares añadidos

Todo el mundo debería limitar el consumo de azúcar, pero especialmente si se tiene artritis. Los azúcares añadidos se encuentran en dulces, refrescos, helados y muchos otros alimentos, incluidos algunos menos obvios como determinadas salsas. Además, las bebidas azucaradas como los refrescos pueden aumentar significativamente el riesgo de artritis.

Según un estudio que se realizó entre jóvenes entre los 20 y los 30 años, aquellos que bebían bebidas endulzadas con fructosa a diario tenían 3 veces más probabilidades de sufrir artritis que aquellos que apenas las consumían.

Alimentos con alto contenido en sal

Reducir el consumo de sal puede ser una buena opción para las personas con artritis. Los alimentos con alto contenido de sal incluyen las sopa enlatadas, las pizzas, algunos quesos o las carnes procesadas.

Existen investigaciones que han sugerido que la ingesta alta de sodio puede ser un factor de riesgo de enfermedades autoinmunes como la artritis inflamatoria y la artritis reumatoide.

Carnes rojas y procesadas

Algunas investigaciones vinculan la carne roja y procesada con la inflamación, lo que puede aumentar los síntomas de la artritis. Por ejemplo, las dietas ricas en carnes procesadas y rojas demuestran altos niveles de marcadores inflamatorios como interleucina-6, proteína C reactiva y homocisteína.

Carne roja

Alcohol

El alcohol puede empeorar los síntomas de la artritis, por lo que cualquier persona con artritis inflamatoria debe evitarlo o al menos restringirlo lo más posible. Además, existen diversos estudios que han demostrado que la ingesta de alcohol puede aumentar la frecuencia y la gravedad de los ataques de gota.