Existen una serie de actividades que las personas, a veces de forma inconsciente, realizamos como manera de regular nuestro estado de ánimo y evitar que caigamos en el abatimiento. Con motivo del confinamiento debido a la pandemia de la COVID-19, un equipo de expertos de la Universidad de Oxford se ha propuesta analizar si las personas con depresión tienen menos probabilidades de planificase para realizar este tipo de actividades y sentirse mejor consigo mismos.

Los resultados del estudio muestran que la homeostasis insuficiente, o lo que es lo mismo, la incapacidad de mejorar el estado de ánimo a través de determinadas iniciativas es probable que se vea agudizada por las limitadas opciones de actividad disponibles durante el confinamiento.

Tristeza

Según los expertos que han participado en la investigación, cuando estamos deprimidos, tendemos a elegir hacer cosas que nos hacen felices, y cuando estamos muy agitados podemos realizar actividades que tenderán a bajar nuestro estado de ánimo. Sin embargo, en nuestra situación actual con la COVID-19 y el aislamiento social, nuestra elección de actividad es muy limitada.

El estudio

Para determinar el grado en que la falta de regulación del estado de ánimo es un factor en la depresión, los científicos analizaron las historias de 58.328 personas, comparando aquellos que presentaban un bajo estado de ánimo (depresión) con los de un alto estado de ánimo. Se incluyó a personas de diferentes lugares del país y con ingresos bajos, medios y altos. 

Los investigadores encontraron un vínculo significativo entre esta incapacidad para hacer actividades que mejorasen el estado de ánimo y la depresión. Específicamente, en las simulaciones que llevaron a cabo, demostraron que la regulación insuficiente del estado de ánimo era un predictor de episodios de depresión más frecuentes y de mayor duración. Las personas que seleccionaron de manera proactiva la secuencia de actividades en las que participaron, tenían menos probabilidades de experimentar un estado de ánimo bajo.

Por lo tanto, esta regulación normal del estado de ánimo se ve afectada en las personas con depresión, proporcionando un nuevo objetivo directo para la investigación y el desarrollo de nuevos tratamientos para ayudar a las personas que sufren esta patología. Los autores proponen la idea de proporcionar sugerencias de actividades dirigidas a las personas con depresión para ayudarlas a regular su humor y prevenir episodios depresivos. Dado que los medicamentos solo funcionan para aproximadamente el 50% de las personas con depresión, sin duda este tipo de descubrimientos son importantes.

Chica depresión

Al entrenar a las personas para aumentar su propia homeostasis del estado de ánimo, se puede prevenir o tratar mejor la depresión. Un hecho que cobra especial relevancia en esta etapa de confinamiento y aislamiento social, cuando las personas son más vulnerables a la depresión y cuando las opciones de actividades están restringidas.

Al analizar las historias de los participantes, los investigadores también descubrieron que los tipos de actividades que los participantes seleccionaban para regular su estado de ánimo variaban según su nivel de ingresos. En los países de altos ingresos, las personas tenían más probabilidades de elegir el ejercicio para regular el estado de ánimo. Mientras que en poblaciones de bajos ingresos, los individuos tenían más probabilidades de elegir actividades religiosas.