Pedro Sánchez sigue enrocado en el suyos argumentos para no ordenar un confinamiento total de España por la pandemia del coronavirus.

El presidente del Gobierno ha afirmado que a la reunión que ha celebrado este domingo, por videoconferencia, con los presidentes autonómicos ha recibido el apoyo y colaboración de todos ellos para llevar a cabo medidas para frenar el virus. Ahora bien, ha rechazado las propuestas formuladas para cesar toda actividad económica, que le ha propuesto el presidente de la Generalitat, Quim Torra y cuatro presidente más.

"Si se miran las medidas que han tomado otros países, España está a la vanguardia. Hemos tomado medidas durísimas", ha dicho el jefe del ejecutivo en la rueda de prensa de este domingo por la tarde desde el Palau de la Moncloa, después de cuatro horas de reunión con los presidentes autonómicos.

 

Torra había instido en la necesidad de "confinamiento total y al detener cualquier actividad que no sean servicios esenciales" y que sólo se permita el desplazamiento de profesionales sanitarios, de alimentación y otros servicios esenciales.

No obstante, Sánchez ha explicado que plantear un confinamiento de un mes de duración, como lo que solicitará el martes en el Congreso de los Diputados, no sólo tiene efectos "sociales", sino también "psicológicos", sobre todo en personas mayores o en víctimas de violencia de género, a las que ha recuerdas que los "mecanismos de protección" siguen habilidades. "Estamos imponiendo unas medidas de extraordinaria gravedad", ha recalcado.