Cuando se habla de la bacteria Escherichia Coli (E. Coli) hay que tener en cuenta que tiene varias cepas. Buena parte de ellas forman parte de la flora intestinal de las personas, y no causan ningún problema. Pero algunas variantes son más problemáticas. De hecho, según una nueva investigación, pueden aumentar las posibilidades de desarrollar cáncer colorrectal, tal y como se recoge en un artículo de la revista Nature.

El estudio concluye que una de las cepas de la E. Coli libera una toxina llamada colibactina que puede dañar las células que recubren el intestino, incrementando el riesgo de que se vuelvan cancerígenas al cabo del tiempo. De hecho, los científicos creen que estas bacterias son responsables de cinco de cada 100 casos de cáncer en este parte del organismo, aunque aún se muestran cautos a la espera de seguir avanzando en la investigación.

Cáncer colorrectal

El estudio, que incluyó expertos de los Países Bajos, el Reino Unido y los Estados Unidos, utilizó réplicas en miniatura del intestino humano, cultivado en el laboratorio, para probar los efectos de la toxina en las células. A continuación, compararon el daño observado con más de 5.000 muestras de cáncer colorrectal tomadas de pacientes. Al final de la investigación encontraron patrones idénticos en, aproximadamente, el 5% de las muestras.

Según los expertos, es la primera vez que se identifica un patrón tan distintivo de daño en el ADN en el cáncer de intestino que ha sido causado por una bacteria que vive en esta parte del tubo digestivo. Se trata de un estudio importante porque, en primer lugar, se puede desarrollar una prueba más certera para detectar tumores intestinales tempranos buscando la presencia de esta toxina. Y, en segundo término, existe la posibilidad de desarrollar una forma de prevenir algunos cánceres intestinales, eliminando la bacteria del cuerpo antes de que pueda causar algún daño. Porque lo cierto es que hay posibilidad de acabar con ella utilizando antibióticos.

Teniendo en cuenta que la mitad de los casos de cáncer de intestino se pueden prevenir evitando el tabaco, manteniendo un peso saludable y llevando a cabo una dieta equilibrada, esta nueva evidencia se suma a las demás medidas para reducir el riesgo de sufrir este tipo de cáncer. Aunque la investigación se encuentra en una etapa temprana, es una prueba más acerca del papel que las bacterias y otros microorganismos que viven en nuestro intestino pueden desempeñar en el desarrollo de la enfermedad.

E Coli Wikipedia

El cáncer colorrectal ocupa la tercera posición entre los más letales, por detrás del pulmonar y hepático en cuanto a número de defunciones. Afecta tanto a hombres como a mujeres y más del 90% de los casos se desarrollan en personas mayores de 50 años, pues el riesgo aumenta con el paso del tiempo. Su supervivencia aumenta considerablemente si no se ha extendido fuera del intestino, pero como en sus inicios no suele causar síntomas, no siempre se detecta de forma temprana. Por eso es importante realizar exámenes periódicos a partir de cumplir los 50.