La ONG Red de Atención a las Adicciones, que interviene en el ámbito de las adicciones y de los problemas que derivan de ellas, presentó recientemente su informe anual en colaboración con el Colegio de Sociólogos, en el que se muestran datos acerca de las personas que han sido atendidas en 2018. Es el mayor estudio realizado en este entorno a nivel europeo, ya que han participado 48.025 personas y un total de 131 entidades de la red.
La investigación analiza, entre otros aspectos, dos tipos de adicciones frecuentes: adicciones con y sin sustancia. La primera, hace referencia al consumo problemático de drogas, bien sea el de los que por primera vez piden ayuda o el de aquellos que llevan tiempo haciéndolo y solicitan atención.
Adicciones con sustancia
Respecto a los primeros, los varones suelen consumir más cocaína (29%) y alcohol (21%) y en el caso de las mujeres las cifras se invierten: el alcohol (28%) y la cocaína (26%). En estas primeras atenciones, la proporción es de una mujer por cada cuatro hombres. Aquellos que llevan más tiempo y han pedido ayuda en más ocasiones, presentan un elevado porcentaje de policonsumo de sustancias. En las mujeres, el problema es con el alcohol y la cocaína y en los hombres, con la cocaína y la heroína. Unos datos preocupantes, que ponen de manifiesto que estamos lejos de resolver un problema como este.
Adiciones sin sustancia
Sin embargo, hay otro dato del informe que llama mucho la atención. Han aumentado de forma considerable las llamadas adicciones sin sustancias, entre las que se encuentran las clásicas como las tragaperras o el bingo, pero también una adicción que crece vertiginosamente entre los jóvenes y que es un gran motivo de preocupación para muchas familias: la de las apuestas deportivas, que entre los hombres ha alcanzado la cifra del 52% de los que piden ayuda. De hecho, las apuestas online se han convertido en la segunda causa de tratamiento por adicción al juego en España. El número de jugadores se ha duplicado en el último año, tal y como recoge el trabajo.
De todas las personas que comienzan a jugar de esta manera, alrededor del 3% se convierten en ludópatas. Teniendo en cuenta la gran cantidad de personas que juega en el mundo, no resulta difícil imaginar la dimensión del problema.
Las razones por las que están triunfando estas apuestas son variadas: el poco tiempo que transcurre entre la apuesta y el resultado; la posibilidad de jugar una apuesta barata y la facilidad para hacerlo a través de cualquier dispositivo; la disponibilidad de 24 horas y su autonomía. Y así hasta que llega un punto, en el que es imposible dejar de pasar horas y horas frente al ordenador o el móvil.
En cualquier caso, las magnitudes demuestran que existe una gran preocupación que no siempre se subraya de forma fehaciente y que está afectando mucho a los jóvenes, sobre todo los hombres.