Vox continua con su cruzada para intentar eliminar a los partidos independentistas y su último paso ha sido registrar una iniciativa en el Congreso para celebrar un referéndum en todo el Estado para ilegalizar a partidos como ERC, Junts, la CUP o EH Bildu, al considerar que son contrarios a la existencia de España y su soberanía. Esta moción surge de la interpelación que este partido dirigió al ministro de la Presidencia, Félix Bolaños, en el último Pleno de control celebrado en el Congreso. En todo caso, su votación no llegará hasta el mes de febrero, cuando se reanude el periodo ordinario de sesiones plenarias.

En el texto, Vox menciona los últimos acuerdos que el Gobierno ha alcanzado con formaciones independentistas, especialmente con ERC y las reformas de los delitos de malversación y sedición. A partir de aquí, concluye que "los enemigos de España actúan con la complacencia del Gobierno a sabiendas de que pueden hallar en él a un aliado". "El Gobierno actúa como una marioneta en manos de separatistas y filoterroristas que obtienen a cambio de su apoyo, concesiones, influencia y transferencias que se traducen en perjuicio de la igualdad de los españoles", rechazan los ultras. 

Por todo ello, la propuesta que pone Vox sobre la mesa es que el Gobierno haga uso del artículo 92 de la Constitución y que convoque un referéndum para "consultar a los españoles si quieren la ilegalización de partidos separatistas y de aquellos que sean contrarios a la existencia misma de España y de su soberanía, así como preguntar aquellas cuestiones con especial trascendencia para adecuar la política del Gobierno a los verdaderos intereses de la Nación". En todo caso, y con independencia de ese referéndum, Vox ya incluye en la moción otra propuesta para modificar la Ley de partidos con el fin de facilitar la ilegalización de formaciones políticas que sean contrarias a la existencia misma de España y de su soberanía. 

Otros intentos (fallidos) de Vox 

No es la primera vez que Vox pide que estos partidos sean ilegalizados, pero en las anteriores ya ha fracasado. En octubre, durante la fiesta Viva 22 del partido, Santiago Abascal planteo la posibilidad de presentar una incitativa en el Congreso para someter a referéndum algunas cuestiones como esta ilegalización de los partidos independentistas, pero también la recuperación de la competencia de educación por parte del Estado o si mantener o no las leyes de género que ha promulgado el gobierno de Pedro Sánchez con la ministra Irene Montero. 

Años antes, en 2020 y en plena pandemia de la covid, se votó una iniciativa similar a la actual en la que los de Santiago Abascal proponían prohibir los partidos que deterioren o destruyan "la soberanía nacional o la indisoluble unidad de la Nación Española". Entonces, solo votaron a favor los 52 diputados ultras, y ni el Partido Popular ni Ciudadanos le dieron apoyo, algo que podrían cambiar (o no) en esta ocasión. "No podemos aceptar la proposición que ustedes nos presentan de manera unilateral y sin consenso que pretenden ilegalizar a todas las fuerzas independentistas por el mero hecho de serlo. Eso va contra nuestra Constitución y contra la doctrina del Tribunal Constitucional", dejó claro entonces el diputado del PP, José Antonio Bermúdez de Castro. El PSOE también fue muy crítico con esta propuesta y en junio de este año registró una iniciativa para que, ante la "democracia limitada" de Vox, el Congreso reafirme que en España se puede defender "cualquier tipo de objetivo político sin exclusión" siempre que se haga por "métodos pacíficos".