Marcha atrás de Guillermo Fernández Vara. El presidente socialista de la Junta de Extremadura ha pedido ahora suspender su investidura para revalidar su cargo, después del acuerdo de gobierno anunciado por PP y Vox en aquella comunidad autónoma. "Nuestra propuesta de investidura ha tenido su efecto; lo imposible se ha hecho posible; en mi opinión, se tendría que celebrar una nueva ronda de contactos y de allí saldría la suspensión de la investidura y la convocatoria de otra", ha escrito en su cuenta de Twitter.

"¿Si era tan sencillo, por qué todo este ridículo televisado?", se ha preguntado también el todavía presidente extremeño en las redes sociales. Fernández Vara se ha referido de esta manera al constante toma y daca que han mantenido el PP y Vox en las últimas semanas. En un primer momento, el PP se plantó y se negó a aceptar la entrada de la extrema derecha en un ejecutivo capitaneado por María Guardiola, argumentando que Vox no había recibido suficientes votos el 28-M y no tenía suficiente fuerza para exigir la entrada al gobierno. Pero la iniciativa del PSOE, que consiguió ya la presidencia de la asamblea extremeña y ya tenía programada una investidura de Vara, ha hecho que los partidos de Alberto Núñez-Feijóo y de Santiago Abascal se espabilaran.

Así, PP y Vox han anunciado este viernes que habían llegado a un acuerdo de coalición para la Junta de Extremadura. María Guardiola será la presidenta, mientras que el partido de Santiago Abascal tendrá la Consejería de Gestión Forestal y Mundo Rural. La firma del acuerdo entre Guardiola y el portavoz de Vox en la Asamblea de Extremadura, Ángel Pelayo, está programada para este viernes al mediodía.

Fuentes del PP lamentan que el acuerdo no haya llegado antes y destacan, por ejemplo, que los populares habían propuesto a Vox la presidencia de la Asamblea extremeña y una silla más en la mesa parlamentaria. Paralelamente, los populares justifican que han permitido la entrada de Vox en aquellos sitios en que su voto afirmativo era imprescindible para conseguir la investidura. "Defendemos nuestra legitimidad para gobernar en solitario, donde somos la fuerza más votada y tenemos más escaños que toda la izquierda junta", añaden.

Finalmente, insisten en que los acuerdos alcanzados con la extrema derecha "no implican cesiones ideológicas" y confirman una "forma de proceder entre el PP y el PSOE". Destacan que el "sanchismo" hubiera pactado cualquier cosa con el fin de mantenerse en el poder en todas las comunidades autónomas que pudiera. "El PP protege su ideología sin someter sus creencias a las exigencias de nadie", añaden.

El movimiento del PSOE para investir a Vara

El PSOE tomó la iniciativa este miércoles y, ante el constante desacuerdo entre PP y Vox, decidió activar la investidura de Guillermo Fernández Vara. Un día antes, María Guardiola le había pedido tiempo a la presidenta de la Asamblea para ultimar un acuerdo con la formación de la extrema derecha. Además, la investidura —que todo indicaba que sería fallida— se situaba a las puertas de la campaña del 23-J, una forma de poder evidenciar, por parte del PSOE, que PP y Vox van siempre de la mano.