La Sala de lo Penal del Tribunal Supremo inhabilitará al presidente de la Generalitat, Quim Torra, por unanimidad. Así lo asegura El Español, que indica que la decisión se ha tomado sin discrepancias por parte de los cinco magistrados que han examinado el recurso de casación de Torra.

De esta manera, el Supremo confirma la decisión del Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC) de condenar al presidente de la Generalitat a un año y medio de inhabilitación por ejercer un cargo público.

La sentencia ya se ha deliberado y en breve se enviará al TSJC, que es quien tiene que ejecutar la sentencia. A partir de aquí, Torra tendrá que abandonar el cargo y, tal como indican los servicios jurídicos del Departament de Presidència, el presidente del Parlament, Roger Torrent, tendrá la potestad de activar el proceso electoral.

El citado digital afirma que los magistrados "no han tardado en llegar a una decisión" y que eso se ha debido al hecho de que "el presidente asumió el delito de desobediencia".

El abogado del presidente, Gonzalo Boye, también augura una inhabilitación y así lo ha hecho constar en su cuenta de Twitter.

La sentencia del TSJC

El TSJC considera acreditado que Torra se negó de manera "contundente, reiterada, contumaz y obstinada" a acatar las órdenes de la Junta Electoral Central (JEC) de retirar de los edificios oficiales de la Generalitat los lazos amarillos y las pancartas que hacían referencia a la libertad de los presos políticos.

Según la JEC, el mensaje de estas pancartas tiene un significado "partidista e inadmisible en periodo electoral" y no respeta el "principio de neutralidad" de este periodo.

En su sentencia, el Supremo destacará que no se trata de una cuestión de libertad de expresión si no de la "obligación que tienen todas las autoridades de obedecer los requerimientos que emite la Junta Electoral como órgano más alto que vela por la transparencia y objetividad de los procesos electorales".

El Govern después de la inhabilitación

Si se confirma la inhabilitación, el presidente Torrent tendrá que activar el proceso electoral. Según el documento redactado por los servicios jurídicos del Departament de Presidència, Junts per Catalunya (JxC) y Esquerra Republicana (ERC) tendrían que pactar la fecha de las nuevas elecciones en la Cámara catalana, de las que derivaría la nueva presidencia de la Generalitat. Según esta información, Torrent tiene la clave para activar el proceso a partir de un pleno que se tiene que convocar en un mínimo de diez días, pero que se puede posponer semanas, o incluso meses.

Mientras tanto, el ejecutivo seguiría actuando en funciones, y el informe, marca que el actual vicepresidente, Pere Aragonès, sustituiría a Torra de forma interina. Todo el equipo de Govern tendría que seguir igualmente sometido al control del Parlament y tendría una actuación limitada.