La Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil ha revelado mensajes de diciembre de 2020 entre Ángel Víctor Torres y Koldo García sobre el papel de Salvador Illa dificultando la contratación de los test de diagnóstico de coronavirus de Megalab. Torres era presidente de las Canarias (y ahora es ministro de Política Territorial), Koldo era el asesor de José Luis Ábalos en el Ministerio de Transportes y “ejercía influencia” sobre el gobierno canario (en palabras de la Guardia Civil) e Illa era ministro de Sanidad (y ahora es el president de la Generalitat). Una de las primeras conversaciones relevantes es del 2 de diciembre, en la que Ángel Víctor Torres mostró a Koldo su disconformidad con Illa, que estaba poniendo palos en las ruedas a la contratación de los test covid. Y Torres estalló: “¡No hay puta manera con Illa! Le he pedido un jodido mes de prueba solo y ni así. ¡Quiere el enfrentamiento y mañana lo tendrá! Yo no puedo llevar a la ruina a Canarias”.

Acto seguido, empezó una conversación entre los dos que hace patente el papel y la influencia que tenía Koldo y su interés porque el pago llegara a buen puerto. “Yo personalmente lo entiendo. […] Intenta suavizar el tema y hazlo. […] Di que es una prueba”, le sugirió el asesor de José Luis Ábalos. “Pero va a hacer que todo Dios vaya contra el gobierno central. ¡TODO DIOS! La verdad es que dan putas ganas de tirar la toalla, y estoy al límite... No quiero que me ayuden. Solo quiero que no me jodan”, contestó Torres.
Diez minutos más tarde, Torres preguntó a Koldo si estaba con Ábalos y reconoció que solo podía recurrir al presidente español: “Solo me queda Pedro”. “Lo intentaré, pero si esto no sale por el capricho de un compañero, Illa, me bajo. No aguanto más”, confesó el entonces presidente canario. “Presentaré el recurso y buscaré la manera de apartarme. Tengo una tremenda fortaleza, pero no peleo contra muros”, añadió. “Disculpa, me desahogué. Me eligieron para defender Canarias y nací y moriré socialista. Pero no puedo más”, apostilló.

Koldo García indicó que el ministro de Transportes estaba comiendo con Prensa Ibérica: “Va a casa ahora, a las 18 [horas] estoy con él y hablas con él”. Y le tendió la mano: “Yo te ayudo en todo. Te doy mi palabra”. “No te preocupes. Ya me desahogué. Pero si quiere que sea un Page, un Lambán, o un tocahuevos, pues será por tíos como Illa. Pedro y José Luis siempre tendrán mi lealtad, pero debe de ser un niño hace décadas… ¡Y tú me ayudas en todo! Así es”, replicó Torres. Finalmente, el presidente canario pidió consejo: “Pregúntale a José Luis si le parece que le caiga a Pedro como opción desesperada”.

El día siguiente, 3 de diciembre, a primera hora, Ángel Víctor Torres volvió a contactar con Koldo García: “Anoche me llamó llla, hay que hacer un último esfuerzo”. Koldo le contestó que estaba en casa de José Luis Ábalos, preguntó a Torres qué tenía que hacer y él le llamó para contárselo. Cinco horas más tarde, Torres le dijo que estaba esperando la llamada de Illa y Koldo le replicó que Ábalos estaba con Pedro Sánchez en el Congreso. Su conversación de WhatsApp desembocó, a tenor de los mensajes, en una llamada entre Ábalos y Torres.
El 4 de diciembre por la mañana, Ángel Víctor Torres escribió a Koldo García con un mensaje de agradecimiento: “Buenos días. Gracias por el esfuerzo. ¡Hablamos!”. En su respuesta, Koldo se quejó de lo que estaba pasando: “No te dejan, pero ya le dije que si continúas con lo que haces ahora, no tiene por qué decir nadie nada. Es increíble, pero ya no sé qué hacer. No entiendo a los técnicos, no lo comprendo”. Y Torres volvió a señalar a Illa: “Me han dejado a los pies de los caballos porque Illa se comprometió conmigo, yo por él con mis socios y agentes y al final Illa me falló. Firmaré decreto y ya veremos qué pasa. No me dejan otra opción. Mis técnicos lo avalan y lo han firmado, e Illa tiene el documento”, manifestó. “Espero que no monten una bronca con el decreto: no tengo otra salida y lo haré pacíficamente, dejando bien al gobierno central que tiene otro criterio, respetable por supuesto”, añadió. La UCO cree podría ser el decreto por el que se contratan las pruebas del diagnóstico de Covid en Canarias.

“Envío un mensaje a Pedro para vernos 10 minutos mañana los cuatro”
El 5 de diciembre al mediodía Ángel Víctor Torres informó a Koldo García que pretendía mantener una reunión con Pedro Sánchez, José Luis Ábalos y Salvador Illa: “Creo debo ir y tener o intentar tener una última reunión con Pedro, José Luis e Illa. ¿Qué te parece?”, le preguntó. Y Koldo lo vio con buenos ojos: “Pues sí, tienes razón”. En ese punto, Torres pidió consejo y validación a Koldo sobre los pasos a seguir: “Le envío entonces un mensaje a Pedro para vernos 10 minutos mañana los cuatro: Illa, Pedro, José Luis y yo. Y que José Luis eche una mano para tener esa reunión. ¿Cuento con ello?”.
— Espera media hora, pero sí.
— Vale. Dime algo por si cojo maleta o no. Saldría en menos de dos horas
— Yo saldría, para gastar mi último cartucho. Me pegaría a José y que te lleve él con [Salvador] Illa y Pedro [Sánchez] y que sepan todo.
— Pero José Luis [Ábalos] sabe [que] quiero verlos? Le enviaría wasap a Pedro.
— Sí sabe que quieres estar con ellos.
— Ya en avión. Mañana nos vemos. Si cuadra, mejor. Creo sería bueno.
— No puedo ir, solo vais los jefes.

Tres horas más tarde, Ángel Víctor Torres aterrizó en la península: “Hola, ya en Madrid. No le mandé mensaje a Pedro. Si surge reunión, mejor”. Koldo le contestó el día siguiente por la mañana: “Yo pienso que sí o, por lo menos, aclarar las cosas para que entiendan las cosas. Tienen que entender que tus socios te van a matar siempre que puedas”. Casi una hora y media después, y sin que hubiera habido una respuesta, Koldo le pidió que le llamara. Seguramente después de hablar con Torres por teléfono, Koldo escribió a Ábalos: “Ángel Víctor te espera con los brazos abiertos, yo sigo diciendo que él tiene razón, espero [que] le puedas ayudar”.
“¿Llamo a Pedro?”
Antes de estos mensajes, el 30 de noviembre, Torres y Koldo mantuvieron otra conversación sobre los test de antígenos. Y se constata como el entonces presidente canario consultaba con el asesor de Ábalos los pasos que tenía que hacer. “Hola. Me pide Illa una semana para lo de los antígenos. Se lo doy. Y ahora poniendo pegas. Yo no puedo retrasar más esa decisión. Lo llamaré en media hora, pero si no se resuelve tendrán que intervenir Ábalos o Pedro”, le dijo. Koldo le contestó que Ábalos estaba con la reina, que todavía le quedaban un par de horas y que le avisaría cunado estuviera con él. Seis horas más tarde, Torres le preguntó si había alguna novedad y sugirió llamar al presidente del Gobierno.
— ¿Llamo a Pedro?
— Llama primero a José ahora, por favor.
— ¿Lo llamo ya?
— Sí.
— No lo coge, sigo intentando.
— Sí, por favor.

Koldo a Torres: “No digas que fui yo, mañana lo cierran Salvador y el presi”
En otro momento, el 5 de noviembre, ambos interlocutores hablaron sobre los tests de covid en los aeropuertos. El presidente canario, desde el Consejo de Gobierno, le preguntó si se mantenía el día 17 como fecha para empezarlos: “No diré fecha, sino que se camina en hacerse”, le anticipó. “Sí, por Dios. No digas que fui yo. Si dices la fecha, igual piensan que soy yo. Pero sigue el día 17. […] Busca las palabras adecuadas, les aseguro que en breve los test se hacen”, le pidió Koldo para que él no quedara expuesto. Y le mandó otro mensaje: “Hoy en València el presi lo habló con José y José le dijo que es necesario. Así que por eso te digo, que es fijo. Además, mañana lo cierran Salvador y el presi”. Una hora más tarde, le envió un documento y le rogó que recibiera luz verde: “¿Puedes intentar que acepte esto? Si lo consigues, se acabó esta mierda, me dicen. Y, según yo leo, no es tanto. Por Dios, si lo consigues, me dejo violar por ti. Posdata, lo último no”.