La vicepresidenta tercera del Gobierno y ministra por la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera, ha defendido que "no se pasará frío" en los hogares el próximo invierno y ha pedido a los ciudadanos que contribuyan individualmente al ahorro energético. Durante una visita a la localidad vallisoletana de Matapozuelos horas antes que se reúna el Consejo de Ministros para aprobar un paquete de medidas urgentes de ahorro energético, Teresa Ribera ha insistido en que el mensaje "más importante" es que "en un contexto tan complicado se trata de ayudar a los vecinos de la Unión Europea" y "evitar el riesgo de racionamiento".
Aunque el paquete de medidas que aprobará el Consejo de Ministros este lunes se centrará en el ahorro energético de los edificios público, la vicepresidenta ha recalcado que se trata de un primer paso para un plan "mucho más completo y estratégico" para el conjunto del país que se presentará en septiembre. "Lo que hacemos hoy, sobre todo tiene que ver con qué cosas son relativamente sencillas y se pueden aplicar de manera inmediata", ha precisado Ribera. En cualquier caso, la responsable para la Transición Ecológica ha subrayado que no se contempla una situación de corte de suministro y ha defendido que "no se trata tanto de poner el énfasis en cuál resulta obligatoria", sino en qué en una situación como esta "es razonable y positivo contribuir en el que cada uno" pueda en su "comportamiento cotidiano".
Además, ha asegurado que cree que los españoles "no pasarán frío" en sus casas el próximo invierno, ya que España no presenta los problemas que sí que se dan en otros países del este y norte de Europa. "En nuestro caso está asegurado abastecimiento, tenemos un perfil diferente, pero sí que es importante insistir en el llamamiento porque en la medida en que podamos, contribuimos", ha recalcado Teresa Ribera, quien|quién ha abogado para compatibilizar las medidas de confort térmico con un uso "inteligente y eficiente" de un recurso energético que puede facilitar a los países vecinos acceder a aquello que no se consuma aquí, alguna cosa que en invierno puede pasar, ha ejemplarizado, para usar "un jersey cómodo o un abrigo".
Bruselas amenaza con presionar
Bruselas podría restringir el aire acondicionado y la calefacción por temor a un invierno sin gas, por culpa de un boicot ruso. Es por eso que la Comisión Europea ha reclamado limitar el aire acondicionado a 25 grados y la calefacción en 19. Esta demanda forma parte del plan que presentará Bruselas, 'Ahorra gas por un invierno seguro', con lo que se quiere limitar el consumo del gas a partir de reducir el uso de los sistemas de calefacción y refrigeración. Además, ha aconsejado a las industrias con capacidad que utilicen otras fuentes de energía para aumentar las reservas gasísticas como antes mejor. De hecho, la Comisión pedirá a los países miembros que incentiven con recompensaciones económicas la reducción del consumo de gas en las empresas, como aparte de las medidas que la Unión Europea prepara para un invierno marcado por un posible corte del suministro por parte de Rusia. La agencia EFE ha tenido acceso al borrador del documento, que seguramente se revelará el próximo miércoles, donde se defiende que Europa todavía es capaz de minimizar el impacto de un "posible gran corte" del gas durante la temporada fría del año, si adopta una serie de medidas e incentivos para favorecerlas.